vigo

El Concello finaliza la calle de la urbanización parada en la crisis

La calle Tarragona se queda con un único carril y aparcamientos en ambos lados.
photo_camera La calle Tarragona se queda con un único carril y aparcamientos en ambos lados.

Villa Laura estrena su entorno mientras continúan sin terminar cientos de viviendas

 El departamento municipal de Urbanismo acaba de licitar un proyecto modificado de las obras de remate de la urbanización del entorno de la calle Tarragona, incluida en la urbanización Villa Laura, el ámbito local que quedó más afectado por la crisis del “ladrillo”, donde han quedado cientos de pisos sin finalizar. La actuación le correspondía a la junta de compensación de la urbanización pero ante la quiebra y paralización de la obra de los edificios optó el Concello por terminar al menos la calle. Fuentes municipales señalaron que la obra está prácticamente finalizada, ahora solo pendiente de que se coloque el arbolado, las luminarias y los bancos con la ampliación del contrato. Finalmente la calle tendrá un único carril de circulación con plazas de aparcamiento en ambos lados. 
Hace dos años, en febrero de 2015, la Gerencia de Urbanismo acordó incoar el expediente de contratación de las obras que quedaron sin ejecutar en la junta de compensación UE 1-01 Villa Laura. El ámbito comprende la totalidad del ancho de la calle Tarragona entre las calles Zaragoza y Barcelona. El proyecto original, paralizado con la crisis, contemplaba este tramo con todos los servicios urbanísticos habituales. La actuación, con cargo al ayuntamiento, salió a licitación por  236.668 euros, pero fue adjudicada a la baja por 164.364, aunque sólo inicialmente, porque finalmente con gastos generales e IVA salió casi exactamente al precio de licitación.
En enero de 2013 quedó claro que la actuación iniciada unos años antes, en pleno ciclo alcista de la economía, no seguiría adelante. El ámbito de la amplia manzana formada por las calles Zaragoza, Barcelona y Sevilla estaba promovido por la empresa Grupo Vialmar. 

DIFICULTADES
La firma no tuvo suerte al hallar dificultades de todo tipo que retrasaron el inicio real de los trabajos, entre ellos la compleja orografía de la zona, donde se halló un terreno mucho más duro de lo esperado, incluyendo piedra. Luego llegaría la crisis del "ladrillo" y a partir de 2012 las obras llevaban meses paralizados por completo al no haber financiación bancaria. Buena parte de los inmuebles están  prácticamente terminados, otros se encuentran en fase avanzada de edificación y el resto apenas en inicio. n

Te puede interesar