Acordaron integrarse y mantener las tres sedes y las plantillas con el fin de mejorar los servicios a las empresas
Las cámaras de comercio de Vigo, Pontevedra y Vilagarcía de Arousa (tres de las cuatro que hay en la provincia, junto con la de Tui) acaban de aprobar su fusión con el objetivo de mejorar la prestación de servicios a las empresas de las tres demarcaciones. Acordaron que se mantendrán las respectivas sedes y las plantillas (22 trabajadores en Vigo y seis en cada una de las otras dos) así como los puntos de atención a las empresas.
Se trata de un paso histórico (no existen precedentes en Galicia) al que los entes camerales se han visto obligados tras aguantar más de cuatro años sin las cuotas obligatorias de los socios (se eliminaron en 2010), su principal vía de financiación.
Ahora se solicitará a la Xunta, que es la Administración tutelante- la aprobación de dicha fusión para lo cual será necesario obtener un informe del Consello Galego de Cámaras. Una vez la Xunta dé visto el bueno a esa integración, se procedería a la elección o designación de los representantes de las cámaras actuales en el pleno de la nueva cuya denominación temporal es Cámara Oficial de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de Pontevedra, Vigo y Vilagarcía de Arousa. Tras la sesión constituyente de este pleno se procedería a la elección de presidente y del comité ejecutivo y a la aprobación del reglamento interno y a partir de esa fecha se pondrá en marcha la integración definitiva, según informaron ayer en un comunicado conjunto.
Esta fusión es la primera que se realiza en España tras la reciente aprobación de la Ley de Cámaras, que establece un nuevo sistema de financiación basado en la prestación de servicios y las aportaciones voluntarias tras la supresión en 2010 de la cuota obligatoria que abonaban los socios.
campaña para captar socios
La de Vigo inició hace unos meses dicha campaña para captar aportaciones económicas y el periodo de adaptación a la adhesión voluntaria no finaliza hasta el 31 de marzo, por lo que será entonces cuando contabilice el número de socios con los que cuenta. Dichas contribuciones voluntarias que contempla la ley se mueven en una horquilla bastante amplia de entre 75 y 4.000 euros anuales.
Esta situación excepcional de las cámaras ralentizó los procesos electorales que se habían tenido que celebrar el año pasado y ahora ya se procederá a la elección de la nueva cámara que se conformará y en la que se prevé que la de Vigo tenga el mayor peso (aglunta más de la mitad de de empresas censadas de la provincia). Su presidente, José Garcia Costas, evitó ayer avanzar si optará a la presidencia y tampoco al Consello Galego de Cámaras, que también lidera.n
