Miles de personas se concentraron en Vigo y pidieron el cumplimiento íntegro de la pena
nnnLas viguesas se echaron ayer a la calle para protestar por la decisión de la Audiencia de Navarra de dejar en libertad bajo fianza a los miembros de "La Manada". Bajo el lema "La complicidad institucional es violencia criminal", más de 5.000 personas levantaron la voz para apoyar a la víctima de la violación de los Sanfermines y para pedir que se haga justicia.
Desde el colectivo "Feminismo Unitario de Vigo", Ángela Serantes denunció que "la justicia machista no permite a la mujer ir en libertad por la calle, queremos salir tranquilas" y reclamó una "justicia acorde al mundo que merecemos las mujeres".
En la protesta de Vigo, que pasó de concentración a manifestación, se pudo ver a diferentes personajes de la vida literaria, política y sindical como María Xosé Queizán, Eva Solla, Isabel Abelairas, Carmen Santos o Ernesto Fontantes entre otros. Salió desde el Marco bajando por Colón, continuando por Policarpo Sanz hasta el Sireno y volvió al Marco por la calle del Príncipe.
La concentración congregó a un gran número de personas, más de 5.000, que en su punto de mayor afluencia llenó la calle Policarpo Sanz desde el cruce de Colón hasta el Teatro García Barbón de Afundación.
Durante el recorrido se pudieron escuchar consignas como "Si es machismo no es justicia", "El machismo es terrorismo", "Machista, escucha, estamos en lucha" o "Cuidado, machista, estás en nuestra lista".
El ambiente en la manifestación fue variado, tanto mujeres jóvenes como mayores, así como familias al completo con los niños. También fue destacada la presencia masculina.
La protesta de ayer coincide con el análisis de la decana del Colegio de Abogados de Vigo, Lourdes Carballo,que cree que este caso ha acaparado más atención social y mediática porque "estamos viviendo un momento en que se está viendo que hay que juzgar con perspectiva de género", y porque concurrieron varias circunstancias, como el movimiento 'me too' y el hecho de que las mujeres se atrevan a dar pasos adelante y a denunciar abusos que antes silenciaban porque "no eran comprendidas" o porque la propia sociedad "era acusadora" con ellas, "todo esto hizo que este juicio tuviera más dimensión".
Por otro lado, el vicepresidente de la Xunta y conselleiro de Xustiza, Alfonso Rueda, reconoció ayer que es "bastante difícil de compartir y entender" la resolución judicial aunque aseguró que aunque acata las decisiones judiciales "otra cosa es que se nos pide que compartamos los argumentos y el resultado. Eso es mucho más difícil", concluyó Rueda.n
