Vigo registró ayer el segundo día de más calor lo que convirtió al municipio en un lugar de especial riesgo forestal
nnn La ciudad ha conseguido pasar el ecuador del mes de julio esquivando las lluvias y manteniéndose en temperaturas tan elevadas que superan los 30 grados. Ayer, Vigo volvió a registrar una máxima de 33 grados, la segunda mayor del año tras los 33,2 del pasado domingo. Esta situación, con una temperatura mínima de 19,2, activó ayer la alerta máxima por riesgo de incendio forestal en el municipio.
Toda la provincia de Pontevedra, junto con Ourense, fueron colocados por Emergencias entre los lugares de España con mayor riesgo de producirse fuegos forestales. Además, las altas temperaturas, que se prevén se mantengan en los próximos días, también colocan a Vigo en el mapa de los lugares del territorio nacional donde hace más calor.
La situación se mantendrá al menos hasta la semana que viene, con mínimas también muy altas que causan el fenómeno del verano, las noches tropicales, hasta ahora inauditas en el clima vigués.
A falta de unos días para que finalice el mes, todo hace apuntar a que este mes de julio solo será comparable al registrado en 2006, año especialmente trágico en cuanto a incendios forestales, debido precisamente a las altas temperaturas registradas con más de la mitad de los días por encima de los treinta grados. El calor de estos últimos días ha disipado las brumas matinales que comenzaron a entrar por la Ría hace una semana.
Las predicciones hablan de que la ola de calor se podría extender a lo largo de los primeros días de agosto, algo menos habitual, pues se trata de un mes, según los expertos muy variable. En Galicia, Vigo, Ourense y Pontevedra superaron los 30 grados, muy alejados de las temperaturas registradas en otros puntos de la comunidad, hasta diez grados por debajo se situaron en A Coruña o Ferrol con un máxima de tan solo 23 grados, por debajo incluso de Lugo, que llegó a los 25 grados de máxima. Santiago se aproximó con 28 grados.n
