Asegura que el convenio del centro cívico se firmó hasta ahora por las presiones del BNG
Más de un centenar de vecinos de Teis se concentraron ayer a las puertas del centro cívico del barrio para protestar por el desalojo del mismo realizado por el Concello, que cambió el fin de semana la cerradura de la entrada. En la propuesta estuvieron acompañados por políticos del BNG, grupo que recibió por la mañana al colectivo. Horas antes de la protesta ciudadana, Abel Caballero defendió el desalojo de la asociación de vecinos acusando a este colectivo de demandar dinero público para su interés particular, al respecto de los 60.000 euros del convenio que, por primera vez en doce años, no se ha firmado entre el Concello y este colectivo.
El alcalde vigués fue preguntado al respecto por los medios de comunicación y aunque de inicio rehusó hacer una valoración del cambio de cerraduras señalando que “el alcalde no entra en eso” finalmente sí lo hizo y arremetió con dureza contra la asociación de vecinos. “Los dineros públicos son para el bien común, no para intereses particulares y hay otras asociaciones de vecinos enfadadas porque en Teis quieren tener privilegios especiales”, dijo.
A este respecto, añadió que es “falso” que los vecinos gestionen el centro cívico de Teis y aseguró que es el Concello quien lo hace a través de un trabajador municipal que se encarga de su funcionamiento, como en los demás centros cívicos de Coruxo, Saiáns y el Casco Vello.
Tras esta declaración, los medios de comunicación insistieron en el tema y preguntaron a Caballero por qué se había firmado entonces el convenio en los años precedentes, a lo que el regidor vigués respondió tajante que “porque el BNG insistía en ello”.
En este sentido, hace dos años se atajó el primer enfrentamiento entre el gobierno local y la entidad vecinal al presionar el BNG a sus entonces socios con una de sus enmiendas para que incluyese el convenio en el borrador de presupuestos de 2012.
Por su parte, el portavoz de la asociación vecinal, Anxo Iglesias, criticó ayer que el gobierno local les exige abandonar el centro cívico “sin una justificación” y subrayó que llevan doce años “gestionándolo de forma ejemplar y justificando cada céntimo”.n
