Lucía Bernárdez relata el pánico que se vivió en los peores minutos del siniestro y destaca la buena labor de los presentes que ayudaron a los jóvenes a salir del agujero
Minutos antes del derrumbe del paseo Lucía Bernárdez se encontraba con sus amigas en el concierto ubicadas en el paseo de piedra. "Íbamos todos juntos y una amiga se empezó a marear y dijimos 'vamos a las maderas que hay menos gente', y estábamos a la mitad del concierto cuando empezó a temblar el suelo y se abrió a la mitad", recuerda la afectada.
Tras el derrumbe "quedamos como si fuera un embudo, había una pared vertical y estábamos un montón de gente encima de otra, yo estaba como recostada encima de gente con gente encima, una tabla en la cintura y varias en las piernas". En su caso se hizo "curas en mi casa" en "las piernas, las tengo reventadas, y los pies, perdí los zapatos".
Desde su posición podía ver "una pared vertical y una madre con un niño pequeño a mi lado y el agua debajo de nuestros pies". En los minutos de pánico se fijó en "una tabla vertical donde agarré las uñas, un chico me cogiópor encima y subimos, yo pensé que moríamos ahí", asegura Lucía Bernárdez conmocionada.
La herida acudió esta mañana al hospital porque "nosotras salimos de las primeras, nos fuimos solo vimos una ambulancia y había un chico con la cabeza abierta sangrando, y dijimos, vamos mañana por la mañana al hospital".
"A mi alrededor todos mis amigos estaban peor que yo"
Yaiza Arias se encontraba en un concierto con unos diez amigos cuando "de repente vemos que todo se mueve y estábamos en el suelo, tenía tres o cinco personas encima, maderas, fue todo muy loco la verdad".
La joven afectada, de 19 años de edad, destaca que "todo el mundo ayudaba, quitaba maderas, te ayudaba a subir, estuvo muy bien la gente". Mientras estaba en el socavón "vi a mi alrededor a todos mis amigos peor que yo, fue horrible".
La principal secuela que le supuso a Yaiza Arias el accidente fue que "no pude dormir, cerraba los ojos y lo recordaba todo de nuevo" también perdió el apetito. Ayer tras el incidente no acudió a los servicios de salud"en caliente no me dolía nada estaba excelente" y además vio que los medios estaban saturados con otras heridas de mayor gravedad, aclara la joven, "pero ahora la rodilla no la siento, me duele mucho al andar".
Carla: "Hicimos una cadena humana para sacar a la gente"
"Cuando el suelo cedió, logré quedarme de pie agarrada a la barandilla", explica Carla Vaqueiro, que había acudido al concierto para estar con su hijo. "Lo primero que me pasó por la cabeza era que teníamos que hacer una cadena humana y ayudar a la gente que estaba debajo de la estructura a salir", recuerda ahora, una vez recuperada de un noche que dice "pudo ser mucho peor. En un primer momento nos pusimos en lo peor ante la situación que se estaba viviendo y los gritos que escuchabas". La rápida actuación de esta viguesa y de muchos otros anónimos ciudadanos permitió "iniciar el rescate. El suelo estaba muy resbaladizo y era casi imposible salir sin ayuda, te volvías a caer".
Poco después del accidente comenzaron a llegar al lugar los primeros policías y servicio de seguridad del propio festival. "Nos dijeron que evacuásemos la zona y que les dejásemos trabajar a ellos", comenta. Fue entonces cuando Carla recordó que aún no había llamado a su hijo "porque lo primero que sentí que debía hacer era ayudar a los que tenía cerca". Inmediatamente le llamó por el móvil "y supe que estaba bien. Así que fui a buscarle y lo increíble es que lo encontré en medio del caos que había en todo el escenario". Y es que como dice ahora "en quel momento me di cuenta de que había mucho chico desorientado y había que ayudar".
“Bomberos me dijeron que mi hija no estaba herida”
Muchos padres buscaban ayer por la mañana a sus hijos que no contestaban al teléfono, probablemente porque muchos estaban durmiendo, pero la intranquilidad se apoderaba de ellos. Antonio es uno de esos padres que ayer por la mañana y tras ver las noticias llamó a su hija sin obtener respuesta. "Estoy 50% aliviado y 100% indignado", explicó, porque intentó saber si su hija estaba bien y al final "los bomberos fueron los que me confirmaron que no estaba entre los heridos", recordó. En este sentido reclamó a las administraciones que "dejen de echar balones fuera como hace el puerto pero el ayuntamiento también tendrá su responsabilidad", señaló.
Considera Antonio que donde se celebró el concierto "no es un sitio que esté hecho para hacer un concierto", por lo que lamentó que se le hubiera dado autorización a la organización para celebrarlo.
Diego: “Vi mucha gente gritando y tirándose al agua”
Diego estaba grabando un directo en Instagram sobre el concierto cuando el suelo se abrió bajo sus pies. Así lo contó ayer en el programa de la mañana de Antena 3 y aseguró que "lo primero fue un golpe seco, como un ascensor, y después todo se fue abajo", relató.
Contó que él cayó encima de una de las columnas de cemento que sostenían el entramado y que vio "a mucha gente gritando y tirándose al agua". Diego se mostró "feliz de estar en casa y poder hablar con vosotros" en referencia a las personas que le estaban entrevistando en la cadena de televisión.
Explicó que fueron momentos "de mucha tensión. Vi a una niña pequeña atrapada, pero al final no ha muerto nadie", señaló.
También quiso destacar el trabajo de los servicios de emergencias: "chapeau por la política y los bomberos, estuvo muy bien organizado", precisó.
Además explicó que el estado del paseo no se veía en muy buenas condiciones. Este joven relató que "el estado de las tablas no se veía bien. El concierto no se debería haber hecho ahí porque era una zona que no te daba mucha seguridad", explicó. En este sentido recordó que "había demasiada gente y mucho agobio, la gente saltaba y pasó lo que pasó", concluyó.
