Las 'falsas alarmas' que se producen 'prácticamente a diario' en Vigo y en toda la provincia de Pontevedra suponen para las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado 'una gran pérdida de tiempo y recursos', según ha explicado el subdelegado del Gobierno , el vigués Delfín Fernández, tras presidir la reunión de la comisión mixta de seguridad privada. El pasado año se registraron un total de 1.067 falsas alarmas en Vigo, y sólo nueve reales, lo que supone apenas el 1 por ciento del total.
El 99 por ciento restantes fueron alertas sin fundamento. Según explicó, la mayoría de las alertas falsas proceden de locales que no están obligados a contar con sistemas de vigilancia, como los centros comerciales, tiendas y oficinas, así como las viviendas unifamiliares. En cambio, entre los 2.048 locales obligados a contar con sistemas de seguridad (administraciones de loterías, galerías de arte, gasolineras, bancos, joyerías y farmacias), tuvieron menos del 10 por ciento de las falsas alarmas.
En este apartado, los locales obligados a tener estas medidas , se produjeron 133 falsas alarmas, de las cuales tan sólo 5 fueron reales. El subdelegado ha explicado que 'una falsa alarma' para la Guardia Civil, que tiene competencias en el 92 por ciento del territorio de la provincia, 'supone un desplazamiento medio de unos treinta kilómetros y una gran pérdida de tiempo y recursos'.
'Hay determinadas falsas alarmas que generan infracciones', indicó Delfín Fernández, antes de concretar que 'este pasado año fueron diecisiete'. 'La mayoría se deben a fallos en el sistema por una manipulación indebida', ha alertado. Del mismo modo, el comisario provincial, Manuel Salgado, ha explicado que una falsa alarma 'genera una sanción desde el momento de cometerla', aunque ha matizado que 'hay una tolerancia y hasta la tercera falsa alarma cometida a lo largo de un mes no se sanciona'. Sin embargo la tendencia es a la baja, 'en su conjunto hay un descenso de un 15 por ciento de descenso por falsas alarmas', añadió Delfín Fernández.
Por sectores, destacó que entre los centros sensibles, el pasado año sólo hubo dos asaltos con alarma en las estaciones de servicio, uno de ellos muy llamativo, al producirse en la gasolinera de Puxeiros, donde el atracador se llevó a rastras un buen rato a uno de los empleados , siendo finalmente detenido y encarcelado.
4.500 agentes en la provincia públicos y privados
La comisión mixta es el órgano de coordinación del que forman parte mandos de la Guardia Civil y Policía Nacional así como otros representantes de los organismos, entidades y empresas relacionadas con el sector de la seguridad privada. Actualmente, hay 53 empresas de seguridad privada en la provincia, son dos más que el pasado año. En total, 1.193 personas trabajan en este sector. A ellas hay que añadir 1.500 guardias civiles, otros mil policías nacionales y 800 agentes de las guardias locales. 'Hay en total unas 4.500 personas dedicadas a la seguridad en la provincia, creo que es un buen número', enfatizó Delfín Fernández.
En este escenario, Fernández ha asegurado que 'los datos apuntan a una cada vez mejor supervisión y control por parte de la seguridad pública'. 'Hay más inspecciones de oficio y menos de instancia de parte y todos los indicadores apuntan a una mejor actuación de la seguridad privada con un descenso importante en las sanciones e infracciones', ha advertido. 'El grado de seguridad parece alto, no sólo porque han descendido los robos sino porque el grado de seguridad es alto, parece muy razonable', dijo.
En este apartado, los locales obligados a tener estas medidas , se produjeron 133 falsas alarmas, de las cuales tan sólo 5 fueron reales. El subdelegado ha explicado que 'una falsa alarma' para la Guardia Civil, que tiene competencias en el 92 por ciento del territorio de la provincia, 'supone un desplazamiento medio de unos treinta kilómetros y una gran pérdida de tiempo y recursos'.
'Hay determinadas falsas alarmas que generan infracciones', indicó Delfín Fernández, antes de concretar que 'este pasado año fueron diecisiete'. 'La mayoría se deben a fallos en el sistema por una manipulación indebida', ha alertado. Del mismo modo, el comisario provincial, Manuel Salgado, ha explicado que una falsa alarma 'genera una sanción desde el momento de cometerla', aunque ha matizado que 'hay una tolerancia y hasta la tercera falsa alarma cometida a lo largo de un mes no se sanciona'. Sin embargo la tendencia es a la baja, 'en su conjunto hay un descenso de un 15 por ciento de descenso por falsas alarmas', añadió Delfín Fernández.
Por sectores, destacó que entre los centros sensibles, el pasado año sólo hubo dos asaltos con alarma en las estaciones de servicio, uno de ellos muy llamativo, al producirse en la gasolinera de Puxeiros, donde el atracador se llevó a rastras un buen rato a uno de los empleados , siendo finalmente detenido y encarcelado.
4.500 agentes en la provincia públicos y privados
La comisión mixta es el órgano de coordinación del que forman parte mandos de la Guardia Civil y Policía Nacional así como otros representantes de los organismos, entidades y empresas relacionadas con el sector de la seguridad privada. Actualmente, hay 53 empresas de seguridad privada en la provincia, son dos más que el pasado año. En total, 1.193 personas trabajan en este sector. A ellas hay que añadir 1.500 guardias civiles, otros mil policías nacionales y 800 agentes de las guardias locales. 'Hay en total unas 4.500 personas dedicadas a la seguridad en la provincia, creo que es un buen número', enfatizó Delfín Fernández.
En este escenario, Fernández ha asegurado que 'los datos apuntan a una cada vez mejor supervisión y control por parte de la seguridad pública'. 'Hay más inspecciones de oficio y menos de instancia de parte y todos los indicadores apuntan a una mejor actuación de la seguridad privada con un descenso importante en las sanciones e infracciones', ha advertido. 'El grado de seguridad parece alto, no sólo porque han descendido los robos sino porque el grado de seguridad es alto, parece muy razonable', dijo.
