Hace unos meses, la viguesa Nerea Calvo Picos decidió abrir su propio web de moda. Escapando de los estereotipos de las bloggueras de tendencias, estrenó ‘miss every day by neri’, que ya cuenta con más de cuatrocientas seguidoras. Con un trabajo de oficina y dos niños, de 11 y 3 años, Nerea combina su vida cotidiana con su gran pasión por el estilismo.
¿Cómo surge la idea de convertirse en blogguera?
Estudié escaparatismo y durante muchos años estuve relacionada con el mundo de la moda. Mis amigos siempre recurren a mí para que les aconseje qué ponerse para determinadas ocasiones. Supongo que también viene un poco de genética, porque a mi madre le llama este mundo. Lo cierto es que comencé casi de broma. Fui un showroom de una amiga y le compré algo de ropa por internet. Para hacer la gracia, subí fotos mías con su ropa a mi cuenta de facebook. Tuvo tan buena aceptación que me animé a abrir mi propio blog.
En pocos meses sus seguidores se cuentan por cientos. ¿En dónde está el secreto?
Tengo 42 años y uso una 42. Mido 1,72, y aunque no me considero guapa, soy estilosa. Creo que llego a un baremo de gente muy amplio. La mayoría de las mujeres de 35 a 45 años no se identifica con las bloggers habituales, que con veinte años, todo les sienta fantástico y acaban usando firmas poco asequibles para la mayoría. Yo soy muy normal.
¿Qué estilismo luce: los de su propio armario o trabaja con alguna marca?
Empecé con mi propia ropa. Luego contacté con tiendas, primero locales y ahora ya colaboró con el pequeño comercio de Ourense, Lugo o Ferrol. Yo elijo las prendas que me gustan. No me pongo cualquier cosa. A raíz de ahí, comenzaron a surgir profesionales interesados en maquillarme o peinarme. No me esperaba esta acogida.
Da el salto a red un poco tarde, ¿no sintió un pudor a la hora de ponerse ante la cámara?
No. Soy muy extrovertida. Siempre llamé la atención dentro de mi círculo de amistades. Tengo la personalidad adecuada para esto.
¿Y qué opina su familia?
No se extrañaron nada. Me veían en ello desde el principio. Siempre apreciaron esos dotes en mí. Están contentos.
¿Se pone algún límite?
No. Me dejo llevar. Tener un blog requiere muchas horas y pongo de mi parte para que funcione.n
