verano

El sol convierte en héroes a profesionales anónimos

Las altas temperaturas complican la labor de muchos profesionales durante el verano
photo_camera Las altas temperaturas complican la labor de muchos profesionales durante el verano

 No salen en los periódicos, pero no es porque no se lo merezcan y es que, aunque el astro rey haya dado una pequeña tregua en los últimos días, tiene bastante mérito plantarle cara a tres -o cuatro, o cinco, depende del meteorólogo- olas de calor a pie de calle, el lugar de trabajo de muchos.
Vendedores de cupones, quiosqueros, carteros u obreros, todos ellos han sufrido más que nadie estos días los rigores de unas temperaturas extremas de las que todo el mundo se queja amargamente, aunque se pase las ocho horas de su jornada laboral en las filiales del polo norte en las que se han convertido muchos edificios de oficinas durante el mes de julio.
"Lo peor de todo era aguantar a la gente, que no paraba de decirme que menudo calor hacía", explica Sergio González, un cartero más que acostumbrado a aguantar las olas de calor en las calles de Madrid.
Más filosofía ha necesitado la cuadrilla de Fermín Hernández, unos obreros que durante estos días han tenido que afanarse para instalar varias conducciones subterráneas en las calles de la capital."No nos queda otra que aguantar y aguantar todos los días, es lo único", indica Hernández, quien confirma que durante todo el mes han estado "abriendo zanjas con pico y pala a 40 grados".Además de la paciencia, su otro secreto es el botijo que, como mandan los cánones, aguarda su momento en la furgoneta, a la sombra.
"Si te pilla dentro de la zanja hace mucho calor y cuanto más profunda sea, más calor", confirma Hernández, quien admite sin reparos preferir el trabajo en invierno, con temperaturas bajo cero, que el de verano, a cuarenta grados a la sombra.
En la misma línea y desde su esquina en la entrada del Mercado de Diego de León, también en la capital, se posiciona Luis Iniesto, vendedor de cupones, quien, acostumbrado a dar la suerte, espera que la suya llegue cuando el mercurio le conceda una tregua".
"Te tienes que acostumbrar a todo",  es  el sentir general de estos ejemplos de profesionales que, llueva, haga frío o, como en estos días, haga calor, cumplen, y encima lo hacen sin quejarse.n

Te puede interesar