Mientras saludaba a la prensa escuchó como desde un grupo le silbaron y gritaron "¡Floja!" y "¡Antipática!"
La reina Letizia fue increpada ayer a la salida de un acto público después de la polémica suscitada con las imágenes de vídeo que reflejaban un desencuentro con la reina emérita Sofía el pasado domingo a la salida de misa de Pascua en la catedral de Palma de Mallorca. Letizia recibió ayer, sin embargo, el aplauso de los participantes en una jornada sobre el tratamiento informativo de la discapacidad por su apoyo a las iniciativas y reivindicaciones planteadas por este sector de la población, que reclama a los medios evitar el sensacionalismo y contribuir a la integración laboral.
En la que era su primera aparición en un acto público, pues el lunes asistió junto al resto de la familia real a una misa por don Juan de Borbón en el monasterio del Escorial, doña Letizia saludó sonriente desde su vehículo a los numerosos informadores que aguardaban su llegada a la sede de la Organización Médica Colegial (OMC), frente al Congreso de los Diputados, donde la esperaba la ministra Dolors Montserrat.
Una vez concluida la jornada, la titular de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad la despidió en la entrada y, desde allí, antes de subir a su automóvil, volvió a dedicar un saludo a una nutrida representación de medios informativos a la que se habían sumado curiosos, entre ellos un pequeño grupo que la silbó y gritó "¡Floja!" y "¡Antipática!" por no acercarse.
le llamó “maleducada"
Una joven, que se encontraba entre la treintena de personas del grupo de curiosos desde detrás de las cámaras fue de las que increpó a la reina Letizia. La joven dijo luego a los periodistas que hubiera querido que la reina dijese "gracias a todos los españoles por dar de comer a toda su familia, y la llamó "maleducada por lo que le ha hecho a su suegra", aludiendo así al vídeo que circuló durante estos últimos días por las redes sociales y del que se han hecho eco todos los medios de comunicación con comentarios y diversas teorías sobre la mala relación entre las reinas.
Mientras los periodistas le preguntaban entre gritos qué tal se encontraba, la reina no realizó ninguna declaración y se limitó a a sonreír y saludar con la mano.
La Casa Real ha optado por no hacer comentario alguno acerca de la polémica que ha generado el vídeo y su única respuesta es seguir trabajando. Ni la infanta Elena ni la madre de la reina, Paloma Rocasolano respondieron a las preguntas de los informadores.
Los políticos y personajes famosos también se muestran cautos. Si Pedro Sánchez se limitaba a decir que "en todas las casas cuecen habas", ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, defendido el "impecable" papel institucional de la Familia Real, y no "considera propio de un político" comentar el vídeo de la polémica.n
