El presente mes de agosto ha registrado siete víctimas mortales en diferentes festejos taurinos
Un hombre falleció el sábado en el Hospital General de Castellón a consecuencia de las heridas sufridas en los festejos taurinos de Borriol (Castellón), según informaron fuentes de la Consellería de Sanidad Universal y Salud Pública de la Generalitat valenciana. El hombre, de 50 años, sufrió diversas heridas al ser alcanzado por un toro durante los 'bous al carrer' programados en la tarde del sábado con motivo de las fiestas en honor a San Bartolomé y San Roque.
Inicialmente fue atendido por el personal sanitario del dispositivo contratado por los organizadores de la celebración taurina, que lo trasladó después al Hospital General de Castellón, donde falleció a causa de las heridas sufridas durante la cogida. Con esta muerte se elevan a diez las víctimas mortales ocurridas en España en lo que va de año debido a cogidas de toros en festejos populares, siete de ellas durante el presente mes de agosto.
Además de este fallecimiento, una mujer de 55 años resultó herida en la noche del sábado en los festejos taurinos de Alcàsser (Valencia), según informó el Centro de Coordinación de Emergencias. La mujer ha sufrido una herida por asta de toro en la pierna y tuvo que ser trasladada al Hospital La Fe de Valencia.
reguero de fallecidos
El presente año iguala así a 2009, cuando murieron diez personas, en el primer puesto en la lista de mayor número de muertos en este festejos, pero este tipo de tragedias son frecuentes todos los años. De esta forma, en 2012 fallecieron ocho personas; en 2010 y 2011, siete; en 2007, cinco.
El 2014, con sólo un fallecimiento, registró el menor número de los últimos 15, en una lista que completan los dos muertos en 2000, 2002, 2005 y 2006, los tres de 2001, 2003, 2004, 2008 y los cuatro de 2013.
La masificación en este tipo de festejos, la inexperiencia, el alcohol o la falta de sueño suelen apuntarse como condiciones que aumentan las posibilidades de que se produzcan cogidas, caídas y contusiones, pero el comportamiento de los toros también resulta en ocasiones determinante. No hay una normativa unificada para todos los festejos taurinos a nivel estatal y son las comunidades autónomas las que se encargan de su regulación. En lo que va de año se han producido ya 10 muertes en este tipo de festejos. La primera llegó el 24 de junio, cuando un hombre de 43 años, vecino de Moraleja (Cáceres), falleció tras recibir varias cornadas durante la lidia tradicional del toro de San Juan en el marco los Sanjuanes de Coria.
La última víctima mortal anterior a la del sabado había ocurrido el día 16 del presente mes en la localidad navarra de Lerín, en donde un joven natural de Calahorra fallecía tras ser corneado durante una suelta de vaquillas en las fiestas patronales. n
