Galicia

La Xunta no aumenta efectivos contra los incendios pero se compromete a cubrir vacantes

Un equipo de brigadistas, desplegado ante un incendio
photo_camera Un equipo de brigadistas, desplegado ante un incendio

La actualización del Plan de prevención y defensa contra los incendios forestales de Galicia (Pladiga) no contempla un aumento en el número de efectivos respecto al pasado año, situando en 5.700 los efectivos autonómicos, a los que se suman otros 1.300 del Estado (incluido el Ejército), aunque compromete la cobertura del "cien por cien" de las vacantes.

Así lo ha anunciado hoy el director general de Ordenación Forestal, Tomás Fernández-Couto, que apuntó que el plan para este año busca que se cubran todas las plazas disponibles "antes de empezar la temporada de alto riesgo", lo que permitirá la agilización del servicio.

De este modo, se reorganizará el operativo de prevención y extinción de incendios forestales en consonancia con los cambios en la tipología y en la distribución temporal de los fuegos registrados en los últimos años.

En este sentido, el responsable de Ordenación Forestal ha insistido en que en Galicia el número de operativos es adecuado mientras que el problema, a su parecer, sigue estando en la "alta actividad incendiaria cuando las condiciones son extremas, sobre todo por el viento" tal y como "acredita un informe de la Fiscalía".

En este sentido, ha recordado que prender fuego al monte es "una actividad delictiva" que "no podemos menos que declararla como homicida" ya que "un incendiario no es menos peligroso que una persona que circula en sentido contrario por una autovía, que un maltratador u otro tipo de delincuente".

El principal esfuerzo del operativo para 2018 se hará en "vigilancia y detección" y para ello el Gobierno gallego ampliará su red digital de vídeovigilancia, que este año constará de 34 cámaras y permitirá contar con "visión directa y continuada del 48 % del territorio" gallego.

De ellas, 13 estarán en la provincia de Ourense, 8 en la de Lugo, 7 en la de A Coruña y otras 6 en la de Pontevedra.

En cuanto a los dispositivos de extinción, Galicia contará con 30 medios aéreos, de la Xunta y del Estado, y 360 motobombas correspondientes a la administración autonómica, local y parques de bomberos.

Este plan, que hoy se presenta ante el Consello Forestal -órgano no vinculante- y que previsiblemente será aprobado por el Ejecutivo durante el mes de abril, ha marcado como objetivo que no ardan más de "20.710 hectáreas a lo largo de 2018", mientras que el pasado año o ardieron un total de 61.700 hectáreas.

De estas, unas 50.000 se calcinaron durante la ola de incendios de octubre en la que fallecieron cuatro personas.

En 2018 se mantiene la intención de que los fuegos no superen las tres hectáreas por incendio, mientras que en cuanto a superficie arbolada por fuego se busca no superar una hectárea por fuego.

Según ha explicado hoy Fernández-Couto se intentará que el número de fuegos mayores de 25 hectáreas se sitúe por debajo del dos por ciento.

Para ello, las parroquias consideradas de alto riesgo incendiario, por su elevada actividad incendiaria o por la especial virulencia con la que afectan los incendios, aumentan de "73 a 77".

En el plan de lucha contra incendios, el Ejecutivo autonómico ha puesto el foco en la colaboración con otras administraciones, y en este sentido, ha hecho hincapié en el convenio propuesto a la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), para la limpieza de las "franjas secundarias" en búsqueda de "más seguridad y eficacia".

No obstante, el representante de la Xunta no ha ofrecido datos económicos al respecto porque todavía se está "analizando hasta donde podemos llegar" ya que la financiación de esta línea en el 2018 correrá a cargo de la Xunta mientras que el objetivo es llegar a un acuerdo de "cofinanciación" para la limpieza y desbroce de los cincuenta metros de las franjas secundarias, cercanas a zonas habitadas, en las que no podrá haber ningún tipo de especies pirófitas, como pinos y eucaliptos.

Asimismo, Fernández-Couto ha puesto en valor las "líneas de colaboración" puestas en marcha con la Real Federación Española de Caza (RFEC) y la Federación Gallega de Caza (FGC) que son "los dos primeros casos" aunque prevén "que a lo largo del año se incorporen más" asociaciones

Te puede interesar