El misionero, nacido en la localidad de Seixalbo, trabaja en el Amazonas desde hace 30 años
n n n Adolfo Zon Pereira, misionero ourensano nacido hace 57 años en Seixalbo, llegó de las vacaciones con un cargo bajo el brazo. El día 12, después de pasar una estadía en su Seixalbo natal, recibió vía telefónica los designios del papa Francisco a través del nuncio del Vaticano en Brasil: "Te comunico que Su Santidad quiere que seas obispo coadjutor en la diócesis del Alto Solimões".
El párroco, de la congregación javeriana, se tomó unos días para meditarlo, confesaba ayer en conversación con La Región: "Quería confrontar la situación conmigo mismo, después acepté y ya firmé el documento oficial". Como él mismo explica, ser obispo coadjutor significa ser el relevo natural "en caso de ausencia del obispo" y ello "requiere unas cualidades específicas" que, por lo visto, no han pasado desapercibidas en Roma. Su día, como era de esperar estaba siendo ajetreado: "Me llevan de aquí para allá". Sin embargo, ha sacado tiempo para atender a los medios: "Me han llamado de toda la prensa y las emisoras locales, estoy abrumado".
El nombramiento supone un paso más en la amplia trayectoria eclesiástica del sacerdote. Cursó estudios en los seminarios de Ourense y Madrid, además de acudir a Pamplona como misionero juvenil. Después, emprendió rumbo a Abaetetuba, un área muy pobre en el delta del Amazonas para luchar por la escolarización de los más pequeños. En Belém, su destino habitual, era profesor de doctrina social de la Iglesia en un centro de formación presbiteral, hasta recibir la llamada: "No lo esperaba para nada, sé que pululaba mi nombre por ahí, pero fue una sorpresa", cuenta al explicar el proceso de selección. Añade que "la relación que yo tenía con el papa Francisco era a través de la nunciatura, ellos debieron presentar mi currículum y, según las necesidades de la zona, me seleccionó".
LA NUEVA DIÓCESIS y el papa
El párroco adelanta que la primera medida que va a tomar será "conocer a fondo mi diócesis, el trabajo de las personas en cada rincón". El Alto Solimões es una microrregión amazónica limítrofe con Colombia y Perú, por donde el Amazonas entra en Brasil, y que cuenta con 230 mil habitantes y 214 mil kilómetros cuadrados de extensión: "Otra realidad distinta a la de Abaetetuba, con el añadido de ser un lugar fronterizo con dos países".
Preguntado por si se ve preparado para asumir el cargo, admite que "la mejor preparación es no perder nunca el contacto con la realidad. Hay que atender la llamada de Dios, si él me ha puesto aquí, me ayudará a salir adelante".
La congregación javeriana es popular por su cercanía a los feligreses y a los desfavorecidos, lejos de la jerarquía y la rigidez conservadora de algunos dogmas. No obstante, Zon matiza que "es una orden como otra cualquiera, estamos para ayudar a los demás". Eso sí, para el papa sólo tiene palabras de alabanza: "Tiene un estilo latinoamericano que ha dado cercanía a la Iglesia, quieras o no, sus orígenes influyen en su papado". n
