La policía reconoce que el repunte es importante, con 25 casos en la provincia de Ourense en seis meses
n n n La denuncia de una vecina de la calle Pena Nofre este miércoles por una agresión sexual en el portal de su casa en Ourense no es un caso aislado en este 2017. El procedimiento judicial, en fase de diligencias previas, se suma a las otras 25 denuncias cursadas en los seis primeros meses del año por delitos contra la libertad e indemnidad sexual (abarca agresiones sexuales, abusos, exhibicionismo, prostitución/explotación sexual, acoso y corrupción de menores). Una cifra nada baladí teniendo en cuenta que no hay más de 15 al cabo de un año (la media de la última década). En 2016, entre enero y junio, hubo cinco.
Pero la mayor preocupación para las fuerzas y cuerpos de seguridad es que cinco atestados de los instruidos en el primer semestre de este año hacen referencias a agresiones sexuales en las que hay penetración y, por tanto, están más penadas. Tres tuvieron lugar en la ciudad (dos de ellas en bares de copas) y otra en el ámbito de la Guardia Civil.
El máximo responsable de la Policía Judicial de Ourense, Demetrio Martínez, se muestra preocupado y considera que cinco violaciones son muchas para una provincia como Ourense. Pero recalca que se trata del "repunte puntual" de una infracción penal. Confía en que "sea pasajero".
Este inspector valora la cara y cruz de estos delitos. El mayor inconveniente es que "son difíciles de prevenir porque los autores no tienen un modus operandi establecido". De hecho, según remacha, actúan "de forma sorpresiva, sin premeditación". Este aspecto favorece a los investigadores: "La mayor parte de los casos se esclarecen" (de los 15 delitos contra la libertad sexual denunciados entre enero y junio en la comisaría de As Lagoas se resolvieron 10).
Martínez señala que el perfil del autor coincide con el de un hombre de 40 a 55 años, reincidente, difícil de rehabilitar, no se arrepiente.n
