Galicia

Un conductor ebrio arrolla y mata a un policía en Carballo

Estado en el que quedó la furgoneta que conducía el causante del atropello en Carballo.
photo_camera Estado en el que quedó la furgoneta que conducía el causante del atropello en Carballo.

El piloto del vehículo, que ya está detenido, arrastraba al menos tres positivos por alcoholemia

Un agente de la Policía Local de Carballo (A Coruña) falleció la madrugada del sábado al ser atropellado por un turismo cuando realizaba un control de alcoholemia. El accidente se produjo sobre las 05,30 a la salida de la localidad coruñesa, en la carretera AC-413, que comunica Carballo y Ordes. Aunque fue trasladado con urgencia a un centro sanitario, el agente murió debido a las graves heridas sufridas.
Al conductor, ya detenido, natural de Suiza y residente en este municipio coruñés, nacido en 1960, se le imputa un delito de homicidio por imprudencia grave y se prevé que ya hoy pase a disposición judicial.
Las pruebas de alcoholemia arrojaron 0,91 y 0,94 miligramos de alcohol por litro de aire espirado y negativo en drogas, según la Guardia Civil, que añadió que el tramo en el que se produjo el atropello estaba limitado a 50 kilómetros por hora. El jefe de la Policía Local de Carballo, Roberto Mosquera, subrayó además que sobre el detenido constan al menos tres positivos por alcoholemia.
El agente fallecido tras ser atropellado, José Luis Garea, de 50 años de edad y natural de Cerceda, en donde será enterrado, tenía tres hijos.

Dos días de luto


Mientras, el Ayuntamiento de Carballo decretó dos días de luto por el policía local fallecido, a la vez que anunció que se personará judicialmente en la causa contra el conductor detenido.
El alcalde, Evencio Ferrero, remarcó que el Ayuntamiento ha decidido personarse "en defensa de los intereses de la familia del policía fallecido y del honor de toda la Policía Local y trabajadores municipales".
Explicó que el control estaba "perfectamente señalizado", con "las luces encendidas en una recta con amplísima visibilidad, por lo que "no ha lugar a ninguna interpretación que no sea una absoluta negligencia por parte del conductor". n

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