El partido judicial de Celanova registró el índice de sobreseimiento libre más alto de toda Galicia
Un 54,8% de las causas abiertas por violencia machista en Galicia acabaron, en el último trimestre de 2013, con su sobreseimiento -bien libre o bien provisional-, mientras que el 8,7% finalizaron con una sentencia condenatoria y otro 2,3% con la absolución del acusado. Con estas cifras, la comunidad gallega se sitúa como la segunda de España donde más casos no llegaron a juicio, sólo por detrás de Navarra, y casi 11 puntos por encima de la media nacional.
Más en detalle, según datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Galicia tiene el tercer dato de sobreseimiento libre -cuando la denuncia es inviable, por ejemplo, porque los hechos referidos no constituyen un delito- más bajo de España (1,4%), pero el de sobreseimiento provisional -por no existir base para una condena- más elevado (53,4%).
Según explicó el fiscal jefe del área de Santiago, Mario Piñeiro, detrás de esta última decisión judicial puede estar una versión de la víctima "que no es suficientemente precisa" o su decisión de "no declarar contra su pareja" o de "no ratificar la denuncia" por, tal vez, una reconciliación. En estos supuestos, añade, el procedimiento "se resiente" y suele acabar en "fracaso".
un 9% de renuncias
Los datos del CGPJ ponen de manifiesto que, en los tres últimos meses del pasado año, en Galicia hubo un 9% de renuncias, lo cual significa que un total de 112 mujeres decidieron no continuar con el proceso. En los citados 90 días, los juzgados gallegos tramitaron 1.243 denuncias, sumando las presentadas por las víctimas (333), por sus familiares (2) y por agentes de seguridad o servicios de asistencia.
En cuanto a los sobreseimientos libres, en una amplia mayoría (12 de 18) de los casos el juez decretó que no había "indicios racionales" de la existencia de delito. En otros cinco, el hecho denunciado no era constitutivo de delito y el último obedeció a la "exención" de responsabilidad criminal. Por su parte, en 662 de los 690 sobreseimientos provisionales no resultó justificada la perpetración del delito y en los 28 restantes no había autor conocido.
En todo caso, entre las causas que conducen a que más de la mitad de los casos de violencia de género que llegan a las salas gallegas finalicen sin que nadie llegue a sentarse en el banquillo de los acusados, Mario Piñeiro no cree que exista "ningún" factor diferencial. Si acaso, vincula la estadística del juzgado en el que trabaja, el cuarto de Galicia con una mayor tasa -cerró 2013 superando el 70%-, con el hecho de que "en términos genéricos" no recibe causas "especialmente graves comparativamente hablando".
Siguiendo con el análisis de los datos de Santiago, donde el sobreseimiento libre fue el año pasado el segundo más alto de toda Galicia, por debajo tan sólo del partido judicial de Celanova (Ourense), extrae como "conclusión técnica" que "esas denuncias igual no se debieron interponer". "Si el juez no ha errado, tenemos que llegar a la conclusión de que esos hechos no deberían haberse tramitado por esta vía", reflexiona, pero puntualiza que "no todos los sobreseimientos son iguales".
En este sentido, llama la atención sobre la "dificultad" de diferenciar, en el ámbito de la violencia machista, "lo que es delito y lo que no lo es", por "la perspectiva puramente subjetiva" de la denunciante. "No me refiero a falsedad o mentira, sino a que la cuestión penal es diferente", apostilla. Por último, apunta que la estadística de sobreseimientos del área de la capital gallega puede estar "distorsionada" por "un atasco judicial". De hecho, en 2012, la tasa de sobreseimiento no alcanzó el 38% y en los dos años anteriores apenas superaba el 50%. n
