El secretario de Relaciones Internacionales del PP, José Ramón García Hernández, presenta su candidatura a liderar el partido con el objetivo de "recuperar el orgullo" y consciente de que el PP necesita "una renovación profunda" para recuperar al electorado de centroderecha.
García Hernández ha asegurado que tras el anuncio de que presentará su candidatura en el congreso extraordinario que tendrá lugar los días 20 y 21 de julio para suceder a Mariano Rajoy ha recibido "muchísimos" apoyos desde dentro del partido, "en colección de cientos".
Sin querer dar nombres ni comentar otras posibles candidaturas, García Hernández se ha mostrado "motivado" ante el objetivo de recuperar el orgullo del PP y renovar "profundamente" el partido, recuperando también al afiliado y "ante el reto histórico de reunir el partido y reunir España".
"El PP, que ya ha sabido superar dificultades en el pasado y construir un partido respetado y admirado en todo el mundo, tiene que recuperar el orgullo de pertenecer a esta gran familia de centroderecha en España que aglutina a muchísimos españoles que piensan como nosotros y confían en nosotros", ha afirmado.
García Hernández ha apostado por limitar los mandatos de los cargos electos a ochos años y por escuchar y contar "mucho más con los afiliados" para que elijan al presidente del partido directamente.
A su juicio, éste es un momento histórico en el que "una izquierda radical que ha pactado entre ella y con los independentismos" quiere arrinconar al PP y al centroderecha, mientras otro partido "que una noche se acostó socialdemócrata y al día siguiente se hizo liberal" -en alusión a Ciudadanos- quiere aprovechar esa debilidad para "arrancarle" votantes al PP.
"Esa es la renovación profunda que necesita el PP, que es ganar de nuevo la centralidad con un debate muy moderno, pero donde nuestros valores sean muy reconocibles", ha explicado.
Se trata de valores liberales, "que apuestan por la libertad, por la reforma, conservadores, que creen que tenemos que dejar una España mejor que la que recibimos, pero que sea identificable y hacer del humanismo cristiano el centro de las personas". EFE
