El Grupo Socialista, reunido ayer en el Congreso, ha cerrado filas en torno al voto en contra a la investidura de Mariano Rajoy esta semana, pero un grupo de sus diputados ya han señalado que, a partir del día 2, convendría abrir un debate en profundidad sobre la posición del partido y las posibles alternativas.
Asistentes a la reunión del Grupo Socialista indicaron a que nadie ha cuestionado la decisión de votar en contra de la investidura de Mariano Rajoy esta semana, recordando que fue adoptada en un Comité Federal y por unanimidad. Ni siquiera el hecho de que el líder del PP llegue a este debate con 170 apoyos ha erosionado la "posición monolítica" del PSOE.
Sin embargo, el expresidente castellanomanchego José María Barreda ya dijo a los periodistas al entrar a la reunión que "la cerrazón" del PSOE a un Gobierno del PP "no puede ser para siempre". Ante sus compañeros de grupo no ha sido tan explícito, pero sí ha señalado que la posición del partido debe tener en cuenta la situación política de cada momento. También han intervenido otros veteranos diputados como Ciprià Ciscar, Soraya Rodríguez, Antonio Trevín o Ignacio Sánchez Amor.
una decisión "práctica"
Ante la postura de los socialistas, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha admitido que no confía demasiado en el candidato del PP a la presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, pero que el suyo es un partido "práctico" que antepone el interés general y que por eso ha firmado el pacto de investidura, y ha pedido al líder socialista, Pedro Sánchez, que cambie de criterio de aquí al próximo viernes para permitir la elección del candidato "popular". "Hay que escoger entre la solución mala y la menos mala", dijo.n
