desafío soberanista

Crece el número de catalanes que abren cuentas fuera de Cataluña

Sede de Caixabank en Valencia, y al fondo, la del Banco de Valencia que compró en 2012, y en cuyo edifico histórico tendrá su sede.
photo_camera Sede de Caixabank en Valencia, y al fondo, la del Banco de Valencia que compró en 2012, y en cuyo edifico histórico tendrá su sede.

Localidades limítrofes de Huesca y Castellón registran colas de ahorradores y empresarios para transferir sus fondos

n n n Las peticiones de apertura de cuentas bancarias fuera de Cataluña han experimentado un crecimiento durante los últimos días, según fuentes financieras, coincidiendo con la tensión política y la posibilidad de que el Parlament apruebe una declaración unilateral de independencia. Estas fuentes han explicado que estos días se acercan muchos clientes a las oficinas preocupados por saber cómo podría afectar una hipotética declaración unilateral de independencia a sus ahorros.
Los directores o gestores de esas oficinas les tranquilizan y dejan claro que su banco garantiza en todo momento sus intereses y que sus ahorros están seguros ante cualquier contingencia. De hecho, tanto CaixaBank como Banco Sabadell, los dos grandes bancos catalanes, han decidido esta semana trasladar sus sedes a Valencia y Alicante, respectivamente, para garantizar que seguirán bajo el paraguas del Banco Central Europeo (BCE) ante cualquier posible escenario.
No obstante, y ante la creciente preocupación de los clientes por sus ahorros, una solución que ofrecen algunas entidades bancarias es la de abrir una cuenta en otra comunidad autónoma española, preferentemente en municipios próximos a Cataluña, como Fraga (Huesca) o Vinaroz (Castellón), pudiendo gestionar su operativa desde su oficina habitual. Los empleados ofrecen esta posibilidad para que los depósitos de los clientes permanezcan en territorio español en caso de una eventual declaración unilateral.

COLAS EN FRAGA
Precisamente, las sucursales bancarias de Fraga registran desde hace unos días colas de ahorradores catalanes que abren cuentas para transferir importantes cantidades de fondos a entidades fuera de su comunidad. Fuentes financieras consultadas han confirmado que el movimiento económico se realiza con cantidades económicas significativas, con especial incidencia en Fraga, localidad vecina a Lleida, pero también en sucursales de otras localidades de la comarca.
Estas fuentes señalan que la media de las imposiciones realizadas corresponderían a cantidades vinculadas a ahorros de largo tiempo, aunque también serían de empresarios con una mayor capacidad financiera. Además de las imposiciones realizadas a nivel presencial, estas entidades bancarias estarían registrando también importantes movimientos de fondos a través de internet o, incluso, por medio de llamadas telefónicas.
Ante la incertidumbre generada, el ministro de Economía, Luis De Guindos, ha subrayado que los clientes de los bancos catalanes no tienen "nada que temer", puesto que son bancos "españoles y también europeos". Desde las propias entidades puntualizan que "se trata de casos aislados teniendo en cuenta que los bancos tienen decenas de millones de clientes".
También han confirmado que "en la gran mayoría, se trata de trasvases entre cuentas del propio banco y no suelen ser cantidades significativas dado que este tipo de operaciones no suele realizarse físicamente desde una oficina".
Asimismo, indican que, pasados estos casos puntuales y las noticias de las últimas horas, "la normalidad, en estas circunstancias, impera en las oficinas".

nuevas salidas
Mientras, la Fundación Bancaria La Caixa ha acordado trasladar de Barcelona a Palma de Mallorca la sede social tanto de este organismo como de CriteriaCaixa, la sociedad de la que es accionista único y que gestiona el patrimonio de la entidad, "mientras se mantenga la actual situación en Cataluña".
En un comunicado, la Fundación que preside Isidre Fainé ha informado de que el nuevo domicilio social de estas dos entidades estará situado en la Plaça Weyler, 3, de Palma, con el fin de preservar sus intereses empresariales y sociales, así como su operativa normal. Esta decisión, asegura la Fundación La Caixa, "tiene un carácter temporal" y no implica el traslado de personas ni de centros o servicios corporativos, que seguirán operando como hasta ahora con normalidad. n

Te puede interesar