Fernando Torres Carbajo (Vigo, 1958) es veterinario y trabaja en la Inspección Pesquera de la Xunta. En sus ratos libres escribe y recopila información sobre Vigo.
Fruto de ello es su segundo trabajo editado por Cardeñoso: "25 empresas del Vigo de siempre". En él están Aguas de Mondariz, Alfageme, Panificadora, Regojo, El Cable Inglés, Fraga, Durán, Vulcano, Capri, Barreras, Curbera, La Artística, Massó, Tranvías, Pescanova o Antonio Alonso, entre otras.
¿Cómo nace esta inquietud por las empresas de Vigo?
Empezó con el libro anterior, “El Vigo de otra época”, que publicamos en 2009. Hicimos una tirada muy cortita pero al ver que la gente se enganchaba y que tenía éxito salieron cinco ediciones y vendimos unos 1.800 libros. El origen fue buscar información sobre el negocio familiar de mi abuelo materno, Alfonso Carbajo, que tuvo un negocio textil en Príncipe a comienzos del siglo XX que se llamó primero Camisería Inglesa y posteriormente Almacenes Carbajo. Buscando fotos antiguas en casa empecé a recoger información del Vigo de aquella época y a comprar algún libro. Cuando ya tenía bastante material no sabía qué hacer con todo eso y no quería meterlo en un cajón. Alguien me dijo ¿por qué no hablas con Ediciones Cardeñoso que publica cosas sobre Vigo? Y así fue. Cuando recogía información del libro anterior me llegaron cosas de empresas grandes de Vigo y pensé entonces que algún día estaría bien poder publicar un libro sobre ello, así que el tema ya me rondaba.
De las “25 empresas del Vigo de siempre” ¿qué historia le costó más sacar adelante?
Las hay que tenía más material y venía la cosa más rodada y otras tuve que buscar más hasta tener la información. Quizá Curbera me costó más. Realmente hay poca información de todas, que es algo que me llamó la atención. Sobre el Vigo industrial y empresarial, la historia reciente de nuestra ciudad, hay muy poco publicado. Fue otra de las razones que me hizo pensar que podía llenar un hueco.
¿Por qué cree que en Vigo no se le ha dedicado más atención a su historia industrial y empresarial?
Somos un pueblo curioso. Nos falta mentalidad de ciudad o algo similar. Sin embargo cuando salen libros sobre Vigo tienen aceptación. A la gente le gusta saber cosas de nuestro pasado. He intentado llenar ese hueco. Este es el libro que a mí me hubiera gustado encontrar en la librería. Yo lo hago desde el punto de vista del lector, que me guste a mí, que sea ameno y no un ladrillo.
¿Cómo seleccionó esta lista de 25 empresas?
Están más o menos en la memoria de todos. Barajé entre 35 y 40 empresas que luego filtré hasta 25 que me parecía un número redondo. Y luego tenían que ser de las empresas clásicas de Vigo y que tuviera información suficiente.
¿Cuánto le llevó la documentación?
Hasta que tuve la información suficiente y luego escribirlo ha sido un proceso de dos años. Hay que tener paciencia y buscar en los archivos, en Pacheco, en el Museo Massó, en Museo do Mar, también Anfaco.
¿Alguna empresa le sorprendió por su historia especial?
Barreras cuando estaba al frente José Barreras. Era ingeniero y empresario a la vez e idearon un barco de vapor de pesca que se llamó Vapor Tipo Vigo que tuvo tal éxito de ventas que llegaron a vender más de 400 barcos. Sacaban un barco cada tres semanas y llegaron a exportarlos a Francia adaptados como guardapescas y a Inglaterra como dragaminas. Es una historia de éxito empresarial. También Confecciones Regojo que llegó a ser el tercer grupo textil de España después de El Corte Inglés y Cortefiel y que llegó a exportar 30.000 camisas mensuales a Alemania. O Aguas de Mondariz, que en una Galicia tan atrasada Enrique Peinador se propuso hacer el mejor establecimiento termal de España y uno de los mejores de Europa. Se trajo hasta aquí a la "crème de la crème" de la sociedad española incluida la realeza y presidentes de Gobierno.
¿Hay material para otro libro?
Hay un tercer proyecto que quiere sacar el editor sobre el Vigo actual para cerrar la trilogía sobre Vigo, pero está verde.
¿Tiene la sensación de que en Vigo se olvida a veces la historia de la ciudad?
Creo que somos como un barco que va tan rápido, preocupándose de lo que tiene por delante, que no le da tiempo de mirar hacia atrás. Y los orígenes son muy importantes. El pasado siempre tiene que ver con lo presente y explica por qué muchas cosas son así.
Después de este análisis que ha hecho de la ciudad ¿cuál es su conclusión? ¿cómo es el vigués?
Somos un pueblo complicado. No llegamos a tener una sensación de ciudad, muchas veces nos falta. Otras ciudades se han creado como Vigo con aluvión pero han llegado a tener identidad. Aquí nos resulta complicado. n
