Dos barcos fueron retenidos en marzo y liberados a los dos días después de robarles comida y combustible
Ningún buque mercante había sido secuestrado en las costas de Somalia desde mayo de 2012, pero el pasado mes de marzo se rompieron las estadísticas y dos barcos sufrieron a los piratas durante un par de días, para luego huir tras robar comida y combustible. Pero además hubo otros cuatro ataques fallidos, según figura en el informe del primer trimestre sobre piratería de la International Maritime Bureau (IMB) división especializada de la International Chamber of Commerce (ICC), que recoge la Asociación de Navieros Españoles (Anave).
Los actos de piratería y robos a mano armada en el mar han aumentado durante el primer trimestre de 2017 respecto al mismo periodo del año pasado, según el citado informe. Así, en los primeros tres meses del año se registraron 43 ataques a buques, frente a los 37 del mismo periodo del año pasado.
Del total, 33 buques fueron abordados, dos secuestrados, cuatro sufrieron disparos y otros cuatro ataques fueron rechazados. En estos incidentes, dos tripulantes fueron asesinados y 61 retenidos como rehenes, secuestrados o amenazados.
En concreto en Somalia fueron dos los secuestros. El primero fue un buque quimiquero, "Aris 13", con bandera de Sri Lanka que sufrió el ataque de los piratas el 14 de marzo y fue liberado dos días después, el 16 de marzo, según la información que aparece en el informe. El segundo fue el "Casay II" secuestrado el 23 de marzo y liberado el 26 tras llevarse los piratas en su skife comida y combustible.
En el listado también aparece un ataque a un buque español en Nigeria, el quimiquero "La Mancha" de Knutsen.
El informe también señala la continuidad de los actos de piratería en las zonas del Golfo de Guinea, en las costas de Nigeria y en aguas del sur de Filipinas, donde en febrero se produjo el asesinato de dos tripulantes. Además, Indonesia también informó de incidentes frecuentes, principalmente robos menores en buques fondeados.
El buque "Galicia", en la Operación Atalanta
Los secuestros del "Vega 5", de Pescanova, y del "Alakrana", de la armadora vasca Echebaster, ambos con tripulaciones gallegas, fueron los que hicieron rebosar el vaso de la paciencia en Europa ante los continuos ataques a buques de países de la UE. Así nació la Operación Atalanta, que sigue en vigor para la defensa frente a los piratas en el Golfo de Adén y el Océano Índico.
Durante el pasado fin de semana, los soldados españoles a bordo del buque "Galicia" realizaron un extenso entrenamiento a bordo, mientras la tripulación y el personal de batalla embarcado mantuvieron su vigilancia en la prevención de la piratería frente a las costas de Somalia.
La Fuerza Naval de la Unión Europea (Eunavfor) realiza un especial seguimiento de los buques del Programa Mundial de Alimentos (WFP) que entregan, desde el mar, la ayuda humanitaria al pueblo somalí. n
