Economía

Elevar la fiscalidad a empresas destruirá empleo, según Rosell

Juan Rosell, presidente de la patronal CEOE.
photo_camera Juan Rosell, presidente de la patronal CEOE.

El presidente de la patronal considera que el aumento de los impuestos retraerá las inversiones

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, advirtió ayer al Gobierno de que incrementar la carga fiscal a las empresas, por ejemplo elevando el impuesto de sociedades, lastrará su competitividad, retraerá su inversión e, incluso, terminará afectando al empleo. En la presentación del informe Tributación Empresarial, el presidente de la patronal se manifestó respecto a los anuncios del Gobierno de subir el impuesto de sociedades o eliminar la base máxima de las cotizaciones sociales, lo que "repercute directamente en los ingresos totales y los beneficios finales de las empresas".
La recaudación conjunta a través del impuesto de sociedades y de las cotizaciones a la Seguridad Social que abonan las empresas asciende a 116.786 millones de euros, una cuantía que de verse incrementada mermaría la capacidad de inversión nacional y extranjera, al tiempo que se reduciría a medio plazo la recaudación, consiguiendo el efecto contrario al deseado.

compromiso sobre salarios
Preguntado sobre si una mayor presión fiscal afectaría a los salarios de los trabajadores, Rosell recordó el compromiso de las empresas con la mejora de los sueldos, especialmente los más bajos, si bien subrayó que podría haber "consecuencias negativas" en algunos sectores o subsectores. Rosell no quiso valorar las medidas anunciadas por el Gobierno hasta conocerlas en profundidad y se limitó a asegurar que las empresas españolas aportan el 30,4 % de los ingresos públicos, mientras que la media en la Eurozona alcanza el 26,2 %.
Citando datos del Banco Mundial, la CEOE detalla que las empresas soportan una carga tributaria con un tipo real del 46,9 % sobre sus beneficios, seis puntos por encima de la media europea del 40,9 %. Según los datos que proporciona el informe, la recaudación a través del impuesto de sociedades alcanzó los 23.143 millones de euros en 2017, aún muy por debajo del récord histórico contabilizado en 2007 (44.823 millones), un año excepcional debido a la "recaudación sin precedentes" registrada en sectores como el inmobiliario y el financiero.
En cuanto a las empresas con bases imponibles positivas (que tienen beneficios a efectos de tributación), sólo tenían el 37 % de ellas en 2014 -último dato disponible-, mientras que el 63 % restante, sobre todo pymes, las tenían negativas. No obstante, Rosell aseguró que, gracias a la recuperación de las empresas que facturan menos de 300.000 euros, el 41 % de las compañías habrá alcanzado bases imponibles positivas, "lo que significa que la recaudación será importante en los próximos tiempos". 

comparativa internacional
En la comparativa internacional, la tributación a través del impuesto de sociedades en España está cuatro décimas por debajo de la media europea (si se mide su peso sobre el PIB) y una décima por debajo (sobre  la recaudación total). Rosell rechazó además la afirmación de que las grandes empresas en España no pagan impuestos, porque "si eso fuera cierto, todas las multinacionales vendrían a España", al tiempo que dijo que "estamos en la media europea, de los grandes países con los que tenemos que competir". 

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