Un grupo de delegados del sindicato CIG ocuparon ayer la sede del Clúster de Empresas de la Automoción (Ceaga) en Vigo en señal de protesta por los despidos en el sector.
Según Xulio Fernández, secretario comarcal de CIG-Industria, los trabajadores entienden que hay una campaña represiva "planificada", que queda patente por los despidos tanto en Citroën como en el grupo Antolín.
"Queremos vincular a Ceaga, que representa a una importante parte del sector", señaló Fernández, que indica que existe "miedo" entre los trabajadores de que despidos como los últimos de Citroën, que han dado pie a una huelga de hambre, se extiendan.n