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La automoción lastra la balanza comercial de Vigo, en 'números rojos'

La automoción representa el 40% de las exportaciones de la provincia.
photo_camera La automoción representa el 40% de las exportaciones de la provincia.

Las exportaciones crecieron en la provincia un 4% mientras las importaciones se dispararon un 10%. El descenso de ventas de coches por el Brexit y la crisis de mercados emergentes, clave.

La balanza comercial de Vigo y la provincia de Pontevedra registró el año pasado 'números rojos' por primera vez con un déficit de 328,5 millones de euros, lastrada principalmente por el descenso de las ventas de la automoción al exterior, especialmente a países como Reino Unido (efecto Brexit) y mercados emergentes como Turquía y norte de África.
 

Las exportaciones aumentaron un 4,6%, hasta los 9.590 millones de euros, pero las importaciones son superiores: 9.919 millones y un crecimiento de un 9,5%, lo que deja un balance negativo, según datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. 
La provincia logró salvar las ventas al exterior en el conjunto del año tras varios meses de caídas, como la de diciembre con una bajada del 5,4% de las exportaciones. Especial incidencia tuvo el sector de la automoción con un descenso de la actividad exportadora de un 25% en el conjunto de Galicia y muy especialmente en Vigo, donde está el núcleo duro de esta industria. Por su parte, manufacturas de consumo también sufrió una brusca caída de un 20,2% mientras que las exportaciones de bienes de equipo crecieron un 20%.
En el conjunto de la comunidad gallega, la tónica es diferente y Galicia finalizó 2018 con una de las balanzas comerciales más saneadas de toda España y un superávit de 3.835 millones por el buen comportamiento de la provincia de Coruña por el textil, fundamentalmente. Así, ésta se sitúa como la cuarta provincia más exportadora -por detrás de Barcelona, Madrid y Valencia- mientras que la de Pontevedra se queda en el octavo puesto.  
En España las exportaciones moderaron su crecimiento, un 2,9%, mientras que las importaciones aumentaron casi un 6%, lo que deja un saldo negativo de 33.840 millones, un 36,8% más de déficit que en 2017. El 65% de las ventas correspondieron a la UE, sobre todo a Francia y Portugal.n

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