El grupo pesquero vigués se encamina hacia su refundación tras la salida del concurso de la matriz y, en poco tiempo, de 10 filiales que tiene en España. La hoja de ruta prevista es la siguiente: En septiembre se celebrará una junta extraordinaria en la que sometarán a votación dos acuerdos trascendentales como son aprobar las operaciones de fusión y segregación para configurar Nueva Pescanova, así como la ampliación de capital, por unos 50 millones de euros (en un principio iban a ser 125).
De esa aprobación dependerá el futuro de la compañía porque, en caso de que no saliera adelante, el grupo se vería abocado a la entrada en liquidación, si los acreedores así lo solicitasen al juez.
Una vez superada dicha junta extraordinaria, en noviembre (antes del día 30) se prevé que se formalice la toma de control por parte de la nueva estructura accionarial, cuya mayoría aplastante ostentarán los acreedores concursales con un 80% con el núcleo duro de la banca (el denominado G7) al frente. Son Sabadell, Bankia, Abanca, Caixabank, BBVA, Popular y la italiana Ubi Banca, cuya participación en Nueva Pescanova "no es previsible que sea eterna", afirma la compañía.n
economía
La ampliación de capital se desinfla hasta 50 millones
