Sergio Ramos, segundo capitán del Real Madrid, tiene buenas sensaciones horas después de sufrir una sobrecarga muscular en la parte posterior del muslo izquierdo ante el Cruz Azul y está convencido de que podrá jugar la final del Mundial de Clubes, tras marcar en semifinales.
Ramos se puso en manos de los fisioterapeutas del club en una mañana en la que no abandonó el cuartel general del Real Madrid en Marraquech. Según informaron fuentes del club madridista, sus sensaciones no han podido ser más positivas y el técnico Carlo Ancelotti ya conoce su evolución favorable.
Por su parte, el colombiano James Rodríguez trabajó al mismo ritmo que sus compañeros en el entrenamiento que el Real Madrid realizó ayer en los campos anexos al Grand Stade de Marraquech, donde entrenó con los suplentes madridistas con sesión de recuperación para titulares.
Los futbolistas del Real Madrid que el martes golearon al Cruz Azul mexicano en las semifinales del Mundial de Clubes, salvo el capitán Iker Casillas, se quedaron en su cuartel general, el lujoso hotel Four Seasons, donde recibieron masaje para recuperarse del esfuerzo realizado.
Casillas: "Nunca bajo la cabeza"
Tras parar ante el Cruz Azul su segundo penalti en una semana, Iker Casillas vuelve a sonreír. "Nunca bajo la cabeza para que me entierren, ni ahora saco pecho. Me dedico a trabajar y a tratar de hacerlo bien", aseguró a FIFA.
"Yo creo que no hay que reivindicarse de nada, mi trayectoria está ahí. A base de partidos espero volver a conseguir mi confianza, que es lo que más ilusión me hace. Me siento en un buen momento", añadió el capitán madridista. n
