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Plata de origen ourensano

El deportista de origen gallego se estira para soltar la piedra hacia la diana.
photo_camera El deportista de origen gallego se estira para soltar la piedra hacia la diana.

Martín Ríos, hijo de un emigrante de O Carballiño, se proclamó subcampeón olímpico

El hispanosuizo Martín Ríos, que ayer se proclamó junto a su compañera Jenny Perret, subcampeón olímpico en dobles mixto de curling en los Juegos de PyeongChang, tiene tres grandes debilidades: Ourense, la tierra de su familia paterna donde retorna cada verano, el Real Madrid y Rafa Nadal.
Hijo de José Ríos, un chapista emigrado a Suiza en los años sesenta, como tantos y tantos gallegos, y Lisbeth, el nuevo subcampeón olímpico de una modalidad que se estrenaba en estos Juegos añadió ayer un nuevo éxito a un palmarés en el que cuenta además con dos títulos Mundiales (Erzurum -Turquía- 2012 y Lethbridge - Canadá- 2017) y el Europeo de 2011 en Tarnby (Suecia).
En Santiago, en Ourense, en O Carballiño, en la localidad de A Costiña de Veiga, muy cerca del río Arenteiro, primos, tías y numerosos amigos siguieron con nerviosismo la final olímpica de Martín y Jenny ante la pareja canadiense Kaitlyn Lawes y John Morris.
"Mi padre es de O Carballiño, Ourense, mi madre es suiza... Nunca viví en España, pero las vacaciones siempre las pasamos ahí. Adoro España, soy hincha del Real Madrid y de Rafa (Nadal). Además he jugado dos años con España, con mi equipo de Jaca y mis tres compañeros de entonces siguen siendo muy buenos amigos míos", indicó Ríos. 
La emoción por la medalla del ourensano y su compañera Jenny Perret se trasladó a Glarus, localidad en la que viven los padres del deportista. José, el progenitor, destacó que "para nosotros es un auténtico orgullo que Martín siga cosechando éxitos. Para él ya era un premio estar en los Juegos Olímpicos, así que imagínese lo contento que está por lograr una medalla, aunque claro, le habría gustado ganar".
La final, a pesar de las horas de diferencia con Corea del Sur la vivieron "con mucha emoción. Lo cierto es que seguimos toda la competición y al ser partidos siempre tan igualados se pasa mal. Aunque si le digo la verdad, fue mucho peor el encuentro ante Rusia que la final contra los canadienses".
Con A Costiña siempre presente, José, emigrado en el año 69 y chapista de profesión hasta que se jubiló el pasado verano, confirma que tanto él como su familia seguirán visitando su localidad natal. "En verano volveremos. No nos planteamos mudarnos porque son muchos años ya. Nuestra hija Sabina también vive aquí, pero sí que iremos en verano". En Ourense, Mari Ríos, tía de Martín se deshace en halagos sobre su sobrino: "Es un niño encantador".n 

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