Dos nombres aparecieron ayer de forma pública en la polémica surgida entre la Federación Española de Fútbol, por un lado, y el Consejo Superior de Deportes y la Liga de Fútbol Profesional, por otro.
Y éstos fueron los del presidente de la Diputación de Pontevedra y de la Federación Gallega, Rafael Louzán, y el del seleccionador absoluto, Vicente del Bosque. Y en ambos casos para apoyar a Ángel María Villar, máximo responsable de la Española.
Rafael Louzán aparece en la amplia nómina de presentes en la última junta directiva, celebrada el pasado miércoles y de la que surgió el polémico escrito en el que la Española reclamaba a la Uefa que apartase a Miguel Cardenal, máximo responsable del CSD, de cualquier comisión. Y la Española hizo público ayer un comunicado resaltando que dicha decisión fue adoptada por unanimidad.
Louzán estaba presente en dicha junta como presidente de la Federación Gallega. Allí también estaban el presidente del Deportivo, Tino Fernández, y el ex presidente, Augusto César Lendoiro, pero nadie del Celta.
En cuanto a Del Bosque, empezó ayer su discurso sobre dicha polémica aduciendo que "no soy quien para entrar en este asunto" aunque insistió en que el presidente de la Federación Española, Ángel María Villar, "quiere lo mejor para el fútbol, desde los clubes más potentes, a los equipos inferiores".
"Villar hace lo que tiene que hacer", añadió Del Bosque y tras subrayar que es el presidente quien "tiene que defenderse", señaló que espera que "se arregle todo e impere la cordialidad".n
