Los 'bleus' marchan triunfalmente por los Campos Elíseos en un desfile deslucido
Los recientes campeones del mundo comprobaron el fervor que ha provocado en Francia su logro en el Mundial, siendo recibidos por cientos de miles de personas en los Campos Elíseos camino del palacio presidencial. Los Griezmann, Mbappé y compañía recibieron el mismo baño de masas en el mismo escenario que se llevaron en 1998 el equipo de Zidane y Desailly. El nexo entre ambos equipos triunfantes es Didier Deschamps: capitán entonces y seleccionador ahora.
Signo de los tiempos que corren, en los que la seguridad ha cobrado un espacio cada vez más importante en un país machacado por el terrorismo, el paseo en autobús descapotable fue deslucido, algo frío ante miles de personas que, además de haber esperado durante horas, se encontraban muy alejados de los ídolos que habían ido a vitorear.
Pero no por ello fue menos impresionante para los jugadores franceses, que perdían su vista en las miles de caras felices que los recibían.n