El Chelsea de Jose Mourinho dio ayer un golpe en la mesa, se reafirmó como el líder de la liga inglesa y demostró que es una máquina de hacer fútbol en la que destacan Diego Costa, que hizo tres goles, y su asistente, Cesc Fábregas.
Ambos se las apañaron para dar la vuelta al marcador en el choque en Stamford Bridge ante el Swansea (4-2), en el que el hispano-brasileño firmó su primer 'triplete', con dos asistencias del catalán, clave en el juego de construcción de los 'blues'.
Se adelantó, con un autogol de John Terry, el conjunto galés que dirige Gary Monk, que llegaba a este duelo, como el Chelsea, con pleno de puntos tras cuatro victorias en la Premier.
Pero después del empate a dos goles que habían firmado antes el Arsenal y el Manchester City, los hombres de 'Mou' no dejaron escapar la oportunidad de distanciar un poco más a dos rivales directos al título liguero.
Tropiezo del Liverpool
El Liverpool encajó su segunda derrota de la temporada tras caer contra el Aston Villa en Anfield (0-1), que deja al cuadro de Brendan Rodgers a seis puntos del líder de la Premier, el Chelsea. El conjunto de Birmingham, sin embargo, prolongó su buen arranque de curso y es segundo en la tabla.n
