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Alonso vuelve a sonreír

Fernando Alonso, Sebastien Buemi y Kazuki Nakajima celebran su victoria en el podio de las Seis Horas de Silverstone.
photo_camera Fernando Alonso, Sebastien Buemi y Kazuki Nakajima celebran su victoria en el podio de las Seis Horas de Silverstone.

El español se impuso con Toyota en las Seis Horas de Silverstone junto a Buemi y Nakajima

El español Fernando Alonso reforzó su liderato en el Mundial de resistencia (WEC) al ganar, junto al suizo Sebastien Buemi y al japonés Kazuki Nakajima, a bordo del coche número 8 del equipo Toyota Gazoo Racing, las Seis Horas de Silverstone, disputadas ayer en el citado circuito inglés.
El doble campeón mundial asturiano de Fórmula 1, que ya había ganado con sus compañeros las Seis Horas de Spa-Francorchamps (Bélgica) y las 24 Horas de Le Mans (Francia), se impuso también en la tercera prueba del campeonato, disputada en la mítica pista británica, en la que relegaron al segundo puesto al otro Toyota híbrido (el número 7), pilotado por el inglés Mike Conway, el japonés Kamui Kobyashi y el argentino José María 'Pechito' López.
Alonso, de 37 años, había anunciado el pasado martes que el año próximo no correrá en F1, en busca de nuevos retos que, de momento, se tornan en emociones canjeables por victorias. Como la de ayer en Inglaterra, donde volvió a sonreír y a extraer oro. En el circuito de la piedra de plata.
Kobayashi arrancó bien desde la 'pole', seguido por Buemi, encargado de afrontar para el equipo de Alonso la primera parte de una prueba en cuyo inicio se tocaron el Rebellion del suizo Mathias Beche y el SMP del francés Sebastién Sarrazin, que tras las primeras quince vueltas había recuperado, tras caerse hasta el fondo del pelotón, el tercer puesto de la prueba.
Los dos coches híbridos de Toyota que encabezan el WEC (siglas en inglés del World Endurance Championship, el Mundial de resistencia) en su categoría principal, la LMP1, cargaron combustible por primera vez tras repetir 22 veces el trazado del circuito que albergó, en 1950, la primera carrera de la historia de la Fórmula 1.
Alonso se subió al coche tras 44 vueltas de Buemi, un giro menos de los que dio Kobayashi antes de cederle el otro Toyota a Conway. Después de algo más de dos horas y media de carrera, el astro astur dio cuenta del inglés, al que superaba en más de cinco segundos, antes del accidente del sueco Henrik Hedman (Dragonspeed) que provocó la entrada en pista del coche de seguridad.
Alonso entregó el auto en primera posición, en la vuelta 92 y poco después de que se rebasará el ecuador de la prueba, a Nakajima, al que no tardó en dar alcance el argentino 'Pechito' López.
A falta de dos horas para el final de la prueba, la ventaja del piloto suramericano del Toyota número 7 era de quince segundos, una renta que se amplió a 45. Kobayashi suplió de nuevo a López y Buemi, que se subió al carro en sustitución de Nakajima, se volvía a acercar a 19 segundos. El suizo acortó distancias, a falta de una hora circulaba a dos segundos; y unos minutos más tarde, a 52 para el final, rebasaba al coche 7. Buemi estuvo sensacional y amplió la ventaja, confirmando la gran actuación de Alonso para subirse ambos al podio. n

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