Los comisarios del organismo europeo revisarán el estado de Balaídos mañana y el viernes
Media docena de enviados de la UEFA revisarán mañana y el viernes el estadio de Balaídos, una visita que genera inquietud en el Celta debido al estado en el que se encuentra el campo. En el seno del club vigués existen dudas fundadas sobre si el informe de los comisarios será o no positivo, puesto que en estos momentos no se cumplen todos los requisitos establecidos en el documento del organismo europeo que regula las infraestructuras necesarias para albergar partidos correspondientes a competiciones continentales.
El estadio de Balaídos está en pleno proceso de reforma. Ahora se está remodelando la grada de Tribuna Alta, así como los bajos de esa zona del estadio. Las obras no estarán finalizadas al menos hasta septiembre, tal y como ha reconocido el Concello. En principio, el primer partido de Liga –el 22 de agosto contra el Leganés– se jugará con Tribuna Alta cerrada y el segundo –el 11 de septiembre ante el Atlético– con todas las gradas abiertas pero aún sin la nueva cubierta.
La primera jornada de la fase de grupos de la Liga Europa se disputará el jueves 15 de septiembre, pero el Celta todavía no sabe si ese día jugará como local o no lo hará hasta la segunda jornada, fijada para el 29 de septiembre. El sorteo de la fase de grupos se celebrará el 26 de agosto en Mónaco.
En cualquier caso, el informe inicial de los técnicos de la UEFA se elaborará en función de lo que vean mañana y pasado. Los comisarios hablarán con los responsables del Celta sobre diferentes aspectos (aficionados, entradas, publicidad, etc.), pero lo que realmente preocupa en Praza de España es la evaluación que realicen de un estadio que se encuentra en obras y que necesita del visto bueno de los técnicos para acoger partidos de la Liga Europa.
Los comisarios lo revisarán todo. Desde el terreno de juego (incluyendo sistema de drenaje, porterías, zona de calentamiento, banquillos...) hasta las gradas, los vestuarios para los equipos y los árbitros, la sala para los controles antidopaje, la sala para los delegados de la UEFA, el espacio para aparcamiento, la zona de prensa, las cantinas o la iluminación, aspecto este último que preocupa de manera especial en el Celta.n
