Un vigués al frente del corazón del Dragão

Ningún vigués ha llegado tan lejos en el fútbol luso. Y mucho menos en un gigante de alcance mundial como el Futebol Clube do Porto, el Oporto, con 116.900 socios a 30 de junio de 2017, según el balance de la SAD presentado en octubre pasado. Carlos Martínez Vaqueiro (Vigo, 1976) puede presumir de que cada jornada en el Estádio do Dragão, la actividad que genera el equipo de Sergio Conceiçao, sea en la denominada Liga Nós, en la Taça de Portugal o en la Liga de Campeones, está supervisada por él. Director del área de Planificación y Organización Deportiva del Oporto desde julio pasado, es el primer español que accede a un cargo de tal relevancia en un grande.
"Trabajé un año como coordinador de la cantera de baloncesto del Oporto, la temporada 12/13", recuerda. Su antecesora en el cargo era Daniela Diogo, que lo conocía como madre de una jugadora que se había enfrentado al Gafanha de baloncesto, el anterior club en el que Martínez Vaqueiro empezó su trayectoria en el país vecino. Sabía cómo trabajaba como entrenador y coordinador en aquella entidad del distrito de Aveiro y no lo dudó: "Me contactó para integrarme en el departamento de planificación. Como dominaba todo lo que era el deporte de pabellón, la idea era coordinar toda la actividad del Dragão Caixa (ndlr. el multiusos del Oporto)".
De las pistas de baloncesto a los despachos, su pasión. A gestionar, a planificar... "Primero solo había los equipos A de básket, hockey y balonmano, pero después creamos el equipo B y también los júniors". Además se encargaba de coordinar la piscina de Campanha (natación), que explota el club, el deporte adaptado, el boxeo y el billar. "Hasta la temporada pasada hacía todo menos fútbol", dice, aunque con Lopetegui fue traductor en Liga de Campeones cada vez que un equipo español jugaba en Oporto.  "Hacemos de todo", bromea.
El Oporto es un gigantesco holding. El Grupo Porto se desdobla en tres ramas, FC Porto Desporto, FC Porto Comercial y FC Porto Operacional, con unos Serviços Partilhados e Corporativos, que recogen las áreas comunes (servicios compartidos de márketing, branding, compras, jurídico, contabilidad, relaciones públicas). "La estructura trabaja para todas las modalidades, no dividimos esfuerzos", explica Vaqueiro.
Con la marcha de Diogo -su marido, Antero Henrique, fue fichado por el Paris Saint Germain en junio como director deportivo, cargo que ocupaba en el universo portista-, surge el momento del vigués. Y eso, pese a sus propias dudas de que pudiesen optar por un gallego. Eduardo Valente, el administrador de FC Porto Operacional, lo llamó. Era el elegido. 
En román paladino, es el cerebro de cada jornada de fútbol en casa. "Si Márketing quiere montar un evento: pues el márketing lo piensa  y mi empresa lo pone en práctica. Operaciones es seguridad, hospitalidad, eventos, el speaker... Mi área organiza todo lo que rodea al partido. Hablamos con Comunicación para ver cómo se monta todo, a qué hora… El speaker tiene un cronograma de lo que se hace cada minuto y segundo. Diseñamos todo lo que va a ser el partido con todas las áreas. Mi trabajo es hablar con todas las áreas y preparar el partido. Y cuando las áreas no se entienden, yo decido".
¿Estresante? No. "Antes, si algo salía mal, mi jefa era la responsable. Ahora soy responsable de mi área y de la gente que trabaja conmigo. Si hay algún problema en el estadio o en el pabellón, el culpable soy yo. Antes trabajaba con gente que tomaba decisiones que afectaban a las modalidades y ahora mismo trabajo con quienes toman las decisiones de todo lo que pasa en el FC Porto. Mi día a día ahora es con quienes toman las decisiones". Los elegidos. n