La NCAA comenzó ayer con tres jugadoras excélticas disputando la liga universitaria más mediática del mundo
Una ala-pívot 'sophomore', es decir, que inicia su segundo año universitario, según la terminología estadounidense, y dos 'freshman', de primer curso académico y, por lo tanto, debutantes en la NCAA. Es esa la relación de componentes de la Armada viguesa, que ha dado un salto en la primera categoría del baloncesto universitario estadounidense. Y es que a Ángela Coello (Vigo, 1997) se han unido Paloma Gonález, desde el Aros León (Vigo, 1999, base), y Candela Hermida (Vigo, 1998, escolta). Tres excélticas asaltan la competición que empezaba este viernes (madrugada de hoy en España) y que ya vivieron jugadoras como Tamara Abalde, de padre vigués (Lamar 2007/08), o Leyre Carrascosa.
Mientras el Celta Zorka manda en la Liga Femenina 2, una parte de su legado se ha ido a hacer las Américas en un campeonato que nada tiene que ver con las expectativas del baloncesto femenino europeo. Lo explicaba Alba Alonso en declaraciones a este diario en septiembre pasado. Ella fue la primera viguesa que pisó suelo estadounidense para formarse y jugar al baloncesto en un instituto de Dakota del Sur, el Baltic High School. "El ambiente que se logra en un pabellón allí no lo he vivido nunca en España ni como espectadora". Algo que refrendaría Tamara Abalde, otra céltica que se fue hace diez años, pero ya a la NCAA. "No hay nada comparable", había explicado. Aquel verano de 'Tami', Ángela tenía 10 años, 9 Candela y 8 Paloma. Ni se imaginaban este futuro.
Paloma ha recalado en el, sobre el papel, equipo más fuerte de los tres con viguesas, porque las Golden Gophers (ardillas doradas), el equipo de la Universidad de Minnesota, juegan la Big Ten, una de las conferencias más fuertes con tres de sus conjuntos (Ohio State, Maryland y Michigan) en las listas de 25 favoritos para ganar la NCAA 17/18. Minnesota no es una universidad ganadora (40% de victorias en su trayectoria en la Big Ten), pero sí compite en un grupo con los mejores, lo que dará un plus de proyección a Paloma González. "El objetivo es ganar. Tenemos que ganar. Necesitamos ganar. Merecemos ganar", dijo la base viguesa al portal oficial de su universidad en el "Media Day", la jornada de puertas abiertas para entrevistas con los medios. La viguesa ha causado muy buena impresión a Marlene Stollings, su entrenadora, que tiene hasta cinco bases/escoltas en la plantilla.
Ángela Coello, por su parte, afronta su segundo año en las "Águilas de Winthrop", equipo que desde enero cuenta con una All-America como entrenadora, Lynette Woodard. La preparadora es una leyenda: primera mujer que jugó con los Harlem Globetrotters, olímpica y cuatro veces All-America. Ocupó el cargo al suspender la universidad a Kevin Cook, entrenador principal, por "un asunto personal" y "conforme a su contrato". Woodard había llegado el verano de 2016 al programa como entrenadora ayudante.
Mientras, Candela Hermida, la última en 'cruzar el charco', y ha recalado en un equipo con seis extranjeras más: una sueca (Lundquist), una nigeriana (Edoka), una checa (Severova), una francesa (Piper) una griega (Gerostergiou) y una australiana (Winter).
Ali Jaques, su entrenadora, dijo cuando se la fichó que "aporta mucha energía y una actitud positiva a nuestro vestuario y estamos felices de tenerla".
Comienza la liga de la emoción. n
