El entrenador navarro cree que la falta de resultados ha creado "un poco de ansiedad"
El entrenador del Celta, Juan Carlos Unzué, se mostró ayer confiado en que su equipo será capaz de revertir su situación en la tabla pese al irregular inicio de temporada. El técnico navarro valora el hecho de que el conjunto celeste haya "competido" en todos sus partidos, cree que la "ansiedad" ha podido afectar a sus pupilos en algunas fases del juego y considera que hace falta "tiempo" para que su idea cale en el equipo, aunque es consciente de que el tiempo es un bien muy costoso en su gremio.
"Lo que falta, como en todos los procesos de cambio, es un poquito de tiempo. Pero tengo asumido que lo que menos tienen los entrenadores es tiempo. Entonces, mi intención es priorizar lo que puede ser más práctico para intentar conseguir esos resultados positivos que en este momento nos den más confianza y más seguridad para después ir añadiendo la idea que uno tiene en la cabeza", explicó tras la sesión de ayer en Balaídos Unzué, que ya ha pasado por otras experiencias previas similares a la actual: "He vivido esa sensación de dificultad cuando empieza un proceso nuevo y normalmente nos ha costado encontrar resultados de inicio. Me pasó en Soria, con Pep Guardiola en el Barça, con Luis aquí... Eso sí, no me sirve de excusa, porque la línea entre poder conseguir los resultados o no también es muy fina".
Más allá de los resultados –una victoria, un empate y tres derrotas en cinco jornadas–, el técnico valora también la competitividad de su equipo. "Reflexionando sobre los resultados de estos partidos, siendo realista y a la vez positivo, lo que he sentido es que en cualquiera hemos competido hasta el último momento. El resultado siempre ha sido muy justo y el equipo ha seguido compitiendo. Eso es bueno y me da confianza", destaca el técnico navarro, que aún no ve nada perdido: "Estamos en una jornada en la que nada de lo que pudiésemos pensar que podía conseguir el equipo está perdido. Es cierto que esto ralentiza el proceso o la idea y seguro que nos da un poquito menos de opciones, pero creo que estamos a tiempo de rectificar la trayectoria y creo que lo vamos a hacer".
Para ello, el Celta, que desperdició sendas ventajas ante Real Sociedad (de 1-0 y 2-1 a 2-3), Betis (de 0-1 a 2-1) y Getafe (de 1-0 a 1-1), necesita cerrar los partidos. La cuestión, indicó Unzué, es cómo hacerlo: "¿Cómo se cierran los partidos? Hay muchas variantes. Hay entrenadores que en un momento dado hacen dos o tres cambios defensivos y se meten atrás. Y les puede ir bien o mal. Y hay otros entrenadores que para mantener el resultado siguen atacando, siendo lo que realmente quieren ser. Esa tipología de entrenadores seguro que también tiene experiencias positivas y negativas", explicó. "Muchas veces lo atribuyes a la necesidad. El jugador, inconscientemente, está en el campo y sabe que no tiene demasiado colchón, demasiados buenos resultados o puntos, y eso condiciona un poco también al aficionado. No sé de dónde parte, pero es una situación que crea un poco de ansiedad, el rival ha sido más fuerte y se ha aprovechado de nosotros", agregó.
Pese a todo, Unzué ha visto a sus jugadores anímicamente recuperados. "He visto un entrenamiento con la gente muy enchufada, alegre, y al final lo mejor que te puede pasar cuando tienes estos golpes es que el siguiente partido aparezca lo antes posible. La competición te enchufa otra vez", destacó el técnico celeste, que hoy en Ipurua espera un compromiso exigente por las características del rival: "Vamos a encontrar un equipo muy intenso. El Eibar aprieta arriba con presiones altas y va a ser un partido con muy poco tiempo para pensar y para decidir, con lo cual buscaremos el equilibrio. Lo bueno que tiene este grupo es que es tan intenso como los rivales. No es algo que yo haya aportado, sino que he intentado mantenerlo".n
