Los equipos de élite de Vigo se han instalado en la zona baja de la tabla esta temporada
El deporte de élite vigués no disfruta de un buen momento. Más allá de los problemas económicos que han sacado a casi todos los equipos de referencia de la ciudad de la máxima categoría –el Celta y el Amfiv son la excepción–, los resultados han enviado a prácticamente todos los conjuntos de élite (primera o segunda división) a la zona baja de la clasificación. Sufrir se ha convertido en costumbre para los aficionados vigueses, ya sean seguidores del Blusens Vigo Rugby, el Octavio, el Celta Bosco, el Amfiv, el Club Vigo Voleibol o el Xuvenil de Teis.
El Celta se ha convertido en un oasis dentro del desierto deportivo de Vigo. Asentado en la zona noble de la tabla y con serias opciones de pelear por regresar a Europa el curso que viene, el conjunto que dirige Eduardo Berizzo es la gran fuente de alegrías deportivas para la ciudad en estos tiempos, a pesar de las derrotas encajadas en las últimas jornadas.
El otro equipo que milita en la máxima categoría de su disciplina, el Amfiv, sólo ha podido ganar uno de sus seis primeros partidos en la División de Honor de baloncesto en silla de ruedas. Salvo milagro, el equipo de César Iglesias no podrá repetir presencia en la fase por el título y tendrá que conformarse con pelear por la permanencia en la presente temporada.
Otro histórico de la ciudad, el Celta de baloncesto femenino, también ha protagonizado un complicado inicio de campaña, suavizado con la victoria de este fin de semana en la cancha del Badajoz (48-63). El conjunto de Cristina Canterno ha echado en falta la presencia en pista de su capitana, la lesionada Marta Canella, y el fichaje de una pívot que no ha acabado de producirse. La consecuencia, sólo dos derrotas en ocho jornadas que sitúan al Bosco décimo en el Grupo A de la Liga Femenina 2, compuesto por 14 equipos.
Peor le van las cosas a otro de los clubes de referencia de la ciudad, el Academia Octavio. No hace tanto peleaba de tú a tú con los mejores equipos de España. Hoy sufre en la División de Honor de Plata, donde ocupa la penúltima posición –plaza de descenso a Primera Nacional– después de haber ganado únicamente dos encuentros en diez jornadas. Ni siquiera el regreso de un histórico como José Ángel Fernández 'Cerillo', que volvió a jugar tras anunciar su retirada el pasado verano, ha permitido al conjunto dirigido por Javier Fernández 'Jabato' abandonar los últimos puestos de la tabla.
Tanto el Celta Bosco como el Octavio eran equipos acostumbrados a vivir en la parte alta de la clasificación cuando militaban en la segunda categoría, y lo mismo sucede con el Blusens Networks Vigo Rugby. Recién descendido de la División de Honor, la escuadra de Norm Maxwell se está encontrando con más problemas de los previstos en la División de Honor B. Con siete partidos a sus espaldas, el Blusens es antepenúltimo en la tabla clasificatoria. Regresar a la máxima categoría se ha convertido en un sueño lejano a las primeras de cambio. El objetivo ahora es alcanzar la permanencia sin sufrir en exceso.
Mientras, en la Superliga 2 de voleibol, el Club Vigo ha reaccionado tras un inicio complicado. Después de sumar en las cuatro últimas jornadas –dos victorias y dos derrotas por 3-2–, el equipo de Suso Penedo marcha octavo en una liga de doce. Peor está un Xuvenil de Teis que este fin de semana cayó a la última posición al perder 3-0 en la pista de La Curtidora, que hasta la fecha cerraba la tabla con pleno de derrotas.
A estas alturas, los mejor situados son los dos representantes de Vigo en la División de Honor Plata Femenina de balonmano. El Seis do Nadal es quinto y el Carballal es séptimo en una competición de once equipos que cierra, todavía sin puntos, el Chapela.
