La canguesa ganó el 1.500 mientras Saleta Fernández y Belén Toimil se colgaron sendas platas en altura y peso
Las medallas esperadas, pero no por ello menos meritorias. Galicia sumó ayer al oro de Ana Peleteiro y a la plata de Jean Marie Okutu el sábado otras tres preseas más: el oro de la canguesa Solange Pereira en el 1.500 y las platas de Saleta Fernández en salto de altura y de Belén Toimil en peso, esta última adornada con un nuevo récord gallego al mejorar la mugardesa su marca personal (16.27). Cinco metales, cuatro de ellos femeninos. Otra vez.
A Solange Pereira se la esperaba en la pelea por revalidar su título, pero partía con rivales de cuidado. La carrera fue táctica y muy lenta hasta que la canguesa cogió el toro por los cuernos y pegó un cambio a falta de 300 metros sin mirar hacia atrás, en plan dominadora. Y dominó tanto que evitó hasta le percance a sus espaldas entre Marta Pérez, al final segunda, y la veterana Nuria Fernández, que acabó en el suelo ensangrentada.
La marca de Solange fue de 4:32.49, pero ayer lo importante era encadenar su tercer Nacional bajo techo. Sobre todo porque la mínima para el Europeo de Belgrado ya la tiene. Y con el título de ayer se gana además su presencia en los relevos del Mundial de campo a través de Kampala. Con el mediofondo nacional dominado, la atleta canguesa quiere dar el paso internacional.
En esa misma final de 1.500 también compitió la tudense Leticia Fernández, que en Salamanca ha confirmado su regreso a la primera línea. Acabó quinta (4:37.56).
Solange Pereira en una carrera en la que Nuria Fernández acabó por los suelos.
Dos platas de mérito
No faltaron a sus esperadas citas con las platas Saleta Fernández y Belén Toimil, ambas a la sombra de dos colosas como Ruth Beitia y Úrsula Ruiz. Además, no se contentaron con el ya meritorio segundo peldaño del podio, sino que las dos lo hicieron con buenas marcas. Saleta saltó a la segunda 1.82 –su mejor marca de la temporada– y, con la plata ya en el bolsillo, erró sus tres intentos sobre 1.85. Y Belén fue un paso más allá, ya que estiró su récord gallego –que bate una vez cada quince días en este 2017– hasta los 16.27.
En cuanto al resto de gallegos, José Alfonso Palomanes fue quinto en triple (15.58), Santiago Ferrer acabó octavo el héptatlon (4.909) y Teresa Rodríguez no pasó de semifinales en 60 vallas (8.99).
Óscar Husillos adorna los Nacionales con el récord de España de 400 metros
Óscar Husillos, atleta palentino de 23 años, se erigió ayer en figura estelar de la segunda jornada de los Nacionales en pista cubierta con una espectacular carrera que acabó en nuevo récord de España de 400: 45.92, que le sitúa segundo en la lista europea del año. Ni siquiera el decimosexto título de Ruth Beitia, que igualaba, con 16, el récord de victorias de Manuel Martínez, restó brillo al récord de Husillos, que a primeros de marzo se estrenará en la selección española en una prueba individual.
Husillos mejoró en una centésima la plusmarca española anterior, en poder de David Canal desde el 20 de febrero del 2005 y conseguida en los Europeos de Madrid. El canario Samuel García, segundo con 46.35, y el toledano Lucas Búa, tercero con 46.94, acompañarán a Husillos a los Europeos de Belgrado, a primeros de marzo.
En la carrera femenina, la granadina Laura Bueno derrocó a la campeona, Aauri Bokesa. Tomó la cabeza al entrar en calle libre y no consintió que la defensora del título la adelantara. Venció con 53.38, mínima para los Europeos de Belgrado. Bokesa fue segunda (53.75).
Por segundo día las gradas del pabellón Carlos Gil de La Aldehuela lucieron repletas para ver en acción a la nueva ola del atletismo español dentro de una lista de una edad media de 24 años, lo que supone que más de la mitad no había nacido cuando se celebraron los Juegos Olímpicos de Barcelona 92.
Ruth Beitia, campeona olímpica y europea de altura, igualó con su mejor salto del año (1.96) el récord de títulos nacionales en pista cubierta, en poder del lanzador de peso leonés Manuel Martínez con 16. Por decisión de su entrenador, Ramón Torralbo, ayer volvió a saltar de lanzado, no de parada, porque no terminaba de ajustar la batida. Hizo su primer salto (1.82) cuando ya había transcurrido casi hora y media desde el comienzo de la final. Solo le quedaba la gallega Saleta Fernández como rival, pero su compañera de entrenamientos no pudo con los 1.85 y la cántabra se quedó sola. Atacó los 1.90 y luego 1.96, su mejor salto del año, que superó a la primera. Luego pidió 2 metros pero no pudo con ellos.
El barcelonés Marc Alcalá se proclamó por vez primera campeón de 1.500 en pista cubierta con 3:52.38 al tiempo que impidió el doblete de Adel Mechaal, ganador del 3.000 el sábado y ayer segundo. Compite gracias a la cautelar que hace dos semanas el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) en el caso de sus tres controles fallidos.
Kevin López y Esther Guerrero defendieron con solvencia la jerarquía en el 800, aunque el sevillano, en cabeza desde el disparo, tuvo que apretar los dientes para no verse adelantado al final por el ídolo local, Álvaro de Arriba, que hubo de resignarse al segundo puesto.
Pablo Torrijos, plusmarquista español de triple, obtuvo título y mínima europea con un salto de 16.70. El veterano Ángel David Rodríguez recuperó la corona de 60 lisos cinco años después y con 36 se apuntó el sexto título con 6.69, mínima europea. El madrileño Mario López, que el sábado tuvo que correr una repesca en solitario tras ser descalificado, llegó segundo en la final de 60 con 6.72.
