celta-valencia

Rueda se unió a un palco otra vez tenso

Alfonso Rueda se sentó junto a Mouriño; al lado del alcalde, el vacío.
photo_camera Alfonso Rueda se sentó junto a Mouriño; al lado del alcalde, el vacío.

El palco de Balaídos volvió a ejemplificar ayer el distanciamiento que existe entre el Celta y el Concello de Vigo.

Como ya sucedió el pasado martes, en el choque liguero ante el Barcelona, el presidente celeste, Carlos Mouriño, rechazó sentarse junto al alcalde de la ciudad, Abel Caballero, y quiso que de nuevo dicho asiento junto al regidor quedase vacío durante todo el encuentro.
En esta ocasión, los protagonistas ya sabían cómo iba a funcionar el reparto de localidades,  por lo que se redujeron los momentos de tensión, aunque de nuevo se hizo evidente la poca sintonía entre las dos partes. Además, ayer se unió a las autoridades el vicepresidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, quien sí se sentó junto al máximo accionista del club, Carlos Mouriño, en la fila central.
Junto a Caballero volvió a situarse la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, y tras ellos concejales de la corporación local como Manel Fernández o Antonio Regades. La próxima cita en Balaídos será el derbi.n 

Te puede interesar