El presidente de la Federación Española de Vela, José Ángel Rodríguez –vigués de adopción, aunque leonés de nacimiento–, se verá obligado a convocar en cuestión de veinte días una asamblea extraordinaria para tratar la moción de censura que presentaron contra él el pasado mes de junio buena parte de los asambleístas, liderados por las territoriales de Cantabria y Madrid. El anterior responsable de la Federación Gallega, que se había negado a convocar dicha asamblea, tendrá que dar su brazo a torcer tras la resolución del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) desvelada ayer por el diario "Marca".
Rodríguez, que vive un desencuentro con buena parte de la vela española, regatistas olímpicos incluidos, podría presentar recurso ante el Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo con sede de Madrid, pero eso no lo eximiría de tener que convocar una asamblea en la que todo apunta a que perderá su puesto.
José Ángel Rodríguez, entonces presidente de la Gallega, fue elegido presidente de la Federación Española de Vela el 16 de diciembre de 2012. Rodríguez se impuso en la votación con 59 apoyos, por los 16 que obtuvo su único adversario, el andaluz Francisco Coro.n
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Rodríguez, obligado a la moción de censura
