700 atletas en la Vigo+11

Roade y Navarrete, cuesta abajo

El entorno de la alameda –Praza de Compostela– volvió a ser el epicentro de la carrera popular Vigo+11, en una mañana nublada pero en la que la lluvia no apareció.
photo_camera El entorno de la alameda –Praza de Compostela– volvió a ser el epicentro de la carrera popular Vigo+11, en una mañana nublada pero en la que la lluvia no apareció.

El nigranés y la viguesa ganaron con total claridad una Vigo+11 que la lluvia respetó y que reunió a casi 700 atletas 

Calle Colón abajo, echando algún último vistazo a su espalda por precaución innata, viendo al fondo la meta, recibiendo el aplauso del público, parando incluso a celebrar con algún allegado la victoria inminente. Así recordará el nigranés Iván Roade su triunfo de ayer en una XII Carrera Popular Vigo+11 que se disputó sin lluvia por el centro de la ciudad. Un recuerdo que no podrá tener, por aquello de ser una carrera mixta, la inefable Ester Navarrete, quien cumplió con ese papel de favorita que tanto y tan bien defiende por estos lares cada vez que se pone las zapatillas para correr. La viguesa volvió a ganar en su ciudad con esa naturalidad que amenaza con restar mérito, injustamente, a su esfuerzo continuado. Bien merecidos los aplausos que recibió. Como todos los que ha recibido y recibirá.

En total fueron 570 los atletas que cruzaron la meta sita en la calle Concepción Arenal, al lado del verde de la alameda. Punto desde el que también tomaron la salida, a las 11:11 horas del día 11 del mes 11, para recorrer 10 kilómetros en un recorrido urbano que tuvo como puntos más distantes la calle Ánimas y el nudo de Isaac Peral. Un circuito con cambios respecto a las pasadas ediciones, sobre todo en una parte final que, eso sí, mantuvo su condición de riada en descenso hacia la llegada.
En la lucha por la victoria, hubo dos grandes dominadores. Iván Roade, al menos, permitió que de inicio le acompañase un trío de rivales formado por Carlos Porto, Vicente Suárez y José Gaspar. Con ellos realizó los primeros giros por calle Carral, García Barbón y Areal. Pero al llegar a Beiramar, el nigranés comenzó a probar al resto con cambios de ritmo hasta dejarlos atrás incluso antes de la subida por la calle Coruña, el que suele ser punto clave para consolidar los ataques. El nuevo atleta del Adas no tuvo problema después para mantener distancias, lo que le permitió esa llegada victoriosa en la bajada por Colón. Al final, con parada y celebración incluidas, paró el crono en un tiempo de 30:48 con 20 segundos de renta sobre el vigués Carlos Porto (SGP) y sobre la sorpresa del día, el portugués José Gaspar, más habitual en las pruebas españolas por Extremadura que por Galicia.

En categoría femenina, el control de Ester Navarrete resultó todavía mayor. Prácticamente, desde la primera zancada. Y, además, sus dos perseguidoras más cercanas, la también viguesa Sandra Mosquera y la redondelana Sofía Freaza, marcaron así mismo sus puestos de podio desde el arranque. A Navarrete le tocó correr contra el crono y calibrando sus propias sensaciones, esas que le llevaron a actuar con prudencia y correr ayer la Vigo+11 en lugar de acudir al cross de Atapuerca.
Ya bien alejada desde los primeros kilómetros, Mosquera también se mantuvo en solitario, aunque en su caso sí que podía ser seguida con la mirada en esa primera mitad de prueba por Sofía Freaza. Ya en meta, la ganadora sacó más de minuto y medio a la segunda (35:42 y 37:23) y los dos últimos peldaños del podio estuvieron separados por un minuto justo.
Por detrás de los más rápidos, el cuerpo central de la carrera. Agradecido por que la lluvia no hiciese acto de presencia y endureciese un circuito ya de por sí exigente. Sobre todo en la zona de calle Coruña y enlace con Camelias, que puso a pruebas las piernas y los pulmones de todos los participantes en una cita organizada este año en solitario por la delegación viguesa de la Federación Gallega de Atletismo. Por cierto, a ella acudieron los dos candidatos que un día antes habían protagonizado las elecciones federativas: el reelegido Isidoro Hornillos y el vigués Joaquín Pérez.
La mañana había comenzado con hasta cuatro carreras previas de categorías inferiores. El entorno de la alameda sirvió de escenario para ver las evoluciones de unos jóvenes atletas que después fueron espectadores animosos de la carrera reina. Ésa que, si la consolidada cita se mantiene, podrán correr en lustros venideros.n

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