Celta

El revulsivo que no fue y pudo haber sido

El entrenador del Celta, Miguel Cardoso
photo_camera El entrenador del Celta, Miguel Cardoso

Tras haberse disputado 24 jornadas de Liga en Primera División, sólo seis equipos han optado por cambiar su apuesta inicial en el banquillo.

Y lo cierto es que, viendo el rendimiento de tales conjuntos, apenas los casos del Villarreal –en su primer cambio– y Celta se escapan de sentirse como decisiones acertadas sin duda.

Ya queda dicho que Miguel Cardoso no ha mejorado los números de Antonio Mohamed. Si el argentino sumaba 1,16 puntos por partido y dejó al equipo celeste en la décimo cuarta plaza, el portugués se queda en 0,83 puntos por duelo con el equipo tres puestos más abajo, aunque todavía fuera de las plazas de descenso.
El Villarreal decidió sustituir a Javier Calleja tras la décimo séptima jornada estando en el puesto 17º y sumando 0,93 puntos por jornada. Llegó Luis García Plaza, que apenas sumó 4 puntos en 6 jornadas (0,66) y fue despedido yendo décimo noveno para que retornase Calleja. Y, esta vez sí ha habido mejoría por ahora: 0,75 puntos por partido  y apenas un puesto más arriba, décimo octavo.
Los otros cuatro clubes que han cambiado de entrenador tienen argumentos para considerar que han acertado o que, al menos, no han empeorado. El Real Madrid ha pasado de ser noveno a tercero y de sumar 1,4 puntos por partido a 2,21 en el tránsito de Lopetegui a Solari; en la Real Sociedad, de Asier Garitano –15º y 1,11– se pasó a Imanol Alguacil –7º y 2,14–; en el Athletic, de Berizzo –18º con 0,78 puntos por partido– a Gaizka Garitano –14º con 1,6–; y el colista Huesca ya lo era con Leo Franco y lo sigue siendo con Francisco y con la misma media (0,75). El Celta intentó que Cardoso fuese ese revulsivo que no ha sido.

Te puede interesar