El vigués, número 13 del mundo, aspira a meterse entre los diez primeros esta temporada
Martín de la Puente (Vigo, 1999) vive su momento más brillante como deportista profesional desde que el año pasado decidió trasladarse a Barcelona para compaginar sus estudios con el tenis en silla de ruedas. Con sólo 19 años, el tenista vigués figura esta semana en el número 13 del ránking mundial de este deporte -su mejor puesto histórico– y es el primer español en esta clasificación por delante de Daniel Caverzaschi, decimoctavo.
De la Puente, que aspira a meterse esta temporada en el Top-10 mundial, se encuentra estos días en Vigo, donde ayer se adjudicó el primer torneo de tenis en silla organizado por el Club de Campo. "Hasta ahora la temporada está yendo increíblemente bien. Estoy muy contento con el trabajo que estamos haciendo. Las cosas van saliendo cada vez mejor, yo me encuentro mejor en la pista y además el ránking está acompañando porque estoy en mi mejor posición hasta ahora. La verdad es que el ránking lo veo como algo secundario, pero no deja de ser un indicador de que las cosas están saliendo bien y estoy inmensamente feliz", afirma el deportista vigués, que considera que su crecimiento como tenista "ha sido a base de trabajo y por las decisiones que hemos tomado mi equipo y yo, como trasladarme a vivir a Barcelona para entrenar y estudiar. Aunque se echa un poco de menos a la familia y los amigos de Vigo, ha valido la pena este esfuerzo para meterse en los puestos altos de la clasificación".
Martín reconoce que le costó adaptarse a vivir en Barcelona, aunque después de su primer curso se ve plenamente integrado en la Ciudad Condal. "Los primeros días estaba un poco más perdido, sin nada que hacer, pero ahora ya estoy perfectamente adaptado y muy contento. Es verdad que a veces sientes algo de morriña, pero me he adaptado bien y no voy a decir que soy un catalán más, porque soy gallego cien por cien, pero me encuentro como pez en el agua. Además creo que toda la mejoría que he experimentado en mi juego se debe a este cambio y creo que es el camino a seguir. Estoy en una buena etapa de mi carrera y espero que lleguen cosas incluso mejores a partir de lo que estamos haciendo", indica el jugador vigués.
"Lo que más me costó fue controlar los horarios. Al ser una ciudad grande, está todo lejos y me costó calcular los tiempos para organizarme. Pero ahora, después de todos los buses y los trenes que he perdido y de todas experiencias que he vivido, me he ido adaptando y ya lo controlo bien", añade.
De la Puente suma actualmente 1.064 puntos en el ránking mundial, lejos de los más de 4.000 que exhiben los tres primeros: el japonés Shingo Kunieda, el británico Alfie Hewett y el argentino Gustavo Fernández."Lo que me falta para llegar a su altura es un poco de continuidad en el juego, porque yo creo que el nivel para jugar lo tengo. Los tres primeros del ránking mundial tienen una marcha más que los diferencia del resto, pero si seguimos así creo que poco a poco nos iremos desarrollando y haciéndolo cada vez mejor", apunta el vigués, que pese a la diferencia actual cree que "puedo llegar a su nivel. Soy un chico muy ambicioso, competitivo, y creo que con esfuerzo todo se consigue. He jugado bastantes veces contra ellos este año y la verdad es que alguna que otra paliza me he comido, pero para mejorar es necesario perder y aprender de las derrotas".
De momento, en las próximas semanas va a competir en Bélgica y Austria con la intención de "agarrarnos al grupo de los diez primeros y meter un pie dentro".
Clinic en el Club de Campo y victoria sobre Álvaro Illobre
Martín de la Puente se adjudicó ayer el primer torneo de tenis en silla de ruedas organizado por el Club de Campo de Vigo al imponerse al también gallego Álvaro Illobre en un partido que se jugó a un solo set (6-2). Antes del encuentro, el tenista vigués impartió un clinic a los alumnos de la escuela de tenis del club, que completó la jornada con otro clinic de sus profesores de este deporte a socios de la asociación Down Vigo. El torneo contó con la asistencia del concejal de Deportes, Manel Fernández, que participó en la entrega de los trofeos.
