Enrique Salgueiro (2 de mayo de 1981) es el director del Guerciotti-Kiwi Atlántico, que en 2019 dará el salto al ciclismo profesional en la tercera categoría, la Continental.
Lo hará con un proyecto humilde y con el apoyo de la Federación de Guinea, pero manteniendo la base deportiva en Galicia, donde "hay jóvenes con un buen nivel".
¿Cómo está el proceso de la licencia?
En diciembre será el listado definitivo de equipos admitidos en la UCI. Por nuestra parte hicimos todos los trámites administrativos que se nos exigen y también afrontamos los seguros. Incluso en algunos sitios aparece nuestro nombre ya, pero todavía no es oficial hasta que la Unión Ciclista Internacional publique la lista.
¿Por qué inició este proyecto?
Nunca salí del ciclismo. Me bajé de la bicicleta y pasé al coche. En mi cabeza siempre estuvo este deporte. Empezamos con algo muy pequeño y es una progresión de la escuadra. Siempre hicimos calendario internacional y quería dar el salto para acceder a un calendario más amplio.
Llama la atención la licencia en Guinea, ¿a qué es debido?
Es una gestión interna. Yo la tramito donde tengo mis intereses y es algo válido. Me busco la vida, siempre lo hice. Tiene validez como cualquier otro equipo. También hay equipos de nivel mundial que después están registrados en Luxemburgo o Seychelles y no lo sabe nadie. Yo sigo teniendo el equipo aquí, con CIF de aquí y categoría júnior aquí y también sub-23. Siempre pueden aparecer críticas, pero prefiero quedarme con el lado positivo.
Y tiene apoyo del país, que siempre es una ayuda.
Ya dimos a conocer el fichaje de Quedutar Cul Ialá porque queríamos que el primer corredor en anunciar fuese ese. Va a estar con nosotros todo el año. Tengo contacto con ellos porque ya estuve en otros proyectos, lo que sucede es que nunca fueron públicos. En 2016 hice gestiones para el equipo Kuwait y también busqué carreras para equipos continentales. Tengo conocimiento del funcionamiento de la UCI y la forma de realizar los procedimientos. Además, también quería entrar en un país así porque creo que va a crecer en los próximos años el ciclismo africano y tiene carreras con buenas condiciones, pero haremos la mayor parte del calendario en Europa.
¿Comenzarán la temporada en África?
Es la idea, ya tengo la invitación para la Tropicale y después quiero estar en alguna más. También tenemos en España, Portugal, Italia e incluso Asia.
¿Qué equipo va a tener?
La idea es un conjunto joven porque creo que la categoría Continental es para eso. No serán ciclistas que disputen carreras, que busquen las victorias. Fuera de España es el enfoque que dan a muchas formaciones de este estilo, centradas en la formación, sin luchar por ganar esta o aquella competición. La media de edad será baja.
¿Será un equipo de gallegos?
Me llamaron ciclistas que están en el pelotón profesional y que hicieron carreras del World Tour. Yo pensando que eran de un equipo amateur y no, eran del primer equipo. El paro en el ciclismo profesional español es alto y la gente empieza a preguntar por el proyecto, se están interesando. También estoy seguro que me van a salir carreras buenas aquí. Igual podemos ir a la Vuelta a Portugal, también me llamaron de Francia y de Bélgica. Lo que sucede es que la categoría Continental es la última en acceder a las plazas, pero nos saldrán cosas interesantes al estar en España y tener la base aquí.
¿Qué Guerciotti vamos a encontrar en competición?
Tendremos una media de edad baja, con ciclistas con proyección y no vamos a correr para ganar, ni tener grandes resultados. Pero sí que vamos a intentar salir en televisión, movernos y dejarnos ver. Mi spónsor prefiere que el ciclista pueda salir cinco o diez minutos en la televisión y no que termine quinto pero no se le vea. Esa es nuestra idea e intentar que proyecto que dure años. Nuestra mayor victoria es que un corredor mío pueda fichar por el Movistar u otro equipo profesional.
¿Qué nivel hay en Galicia?
Creo que existe un buen nivel, que hay ciclistas jóvenes que tienen talento y pueden hacer cosas en la categoría Continental. Veremos en las próximas semanas, pero tendremos ciclistas de aquí y también otros de fuera.
¿Cuánto cuesta hacer un equipo?
Esto es un dolor de cabeza. Tienes que gestionar viajes de avión, hoteles, coches de alquiler... Todo esto con un equipo amateur. Para el año será todavía mayor el esfuerzo. En la oficina tengo un mapa en el que voy marcando los países en los que competimos. Estuvimos en China, en Marruecos, en Argelia, en Polonia, República Checa, Turquía... En un montón de sitios.
¿Cómo se van a organizar?
Tenemos una estructura pequeña, no tenemos autobús ni nada, pero creo que es suficiente para un equipo como el nuestro. Los últimos meses también fueron difíciles por las cuestiones administrativas, hay que hacer muchos trámites, incluso adelantar dinero, y siempre existe algo de incertidumbre. Eso sí, tengo que decir que en la Federación de Guinea nos están ayudando mucho en el aspecto administrativo. Cuestiones que aquí tardan cinco días, allí las gestionan en media hora. Su predisposición es grande y ayudan.
¿En qué consiste la parte social del proyecto?
Ya lo tenía hecho en las últimas temporadas, pero sin hacerlo público. Para la próxima temporada la idea es poder trabajar con cinco o seis corredores jóvenes de allí y poner todo el material que manejamos nosotros para que puedan disponer de unos medios. Otros años ya enviamos para allí cascos y diverso material como unos GPS Garmin, lo que sucede es que no lo publicamos. Ahora vamos a reforzarlo. Creo que es algo bonito poder tener una vertiente social.n
