Rodrigo Corrales (Cangas, 1991) está concentrado con la selección española en Valencia para preparar el Campeonato del Mundo de Qatar, aunque cuenta con escasas opciones de acudir a la cita, ya que cubre el hueco dejado por Sterbik que, con problemas físicos, no acudió a tierras levantinas
. El seleccionador, Manolo Cadenas, ya se lo comunicó y es que conoce a Corrales de primera mano porque también es su técnico en el Wisla Plock polaco, el equipo del portero cangués en la presente temporada.
¿Cómo se siente en Polonia?
La verdad es que estoy muy contento con la experiencia y por el club en el que estoy. Estoy jugando y me he adaptado bien al equipo, por lo que las cosas están yendo bien.
¿Hay mucha diferencia con España?
Teóricamente, cuando se habla de Polonia se piensa en un país del este y complicado. Pero es un país que está creciendo mucho y está en una buena situación. En nuestro club se nota porque muestra seriedad y profesionalidad. En España, cuando estaba en Barcelona todo iba bien, pero el resto... La liga también es diferente y la repercusión es totalmente distinta.
Casi todos los jugadores que salís de España por primera vez notáis la diferencia de inmediato. Sobre todo, a nivel de seriedad.
No sé cómo estaba España hace diez años. A lo mejor se parecía un poco a lo que es ahora fuera. Por lo que he podido vivir yo, salir al extranjero es positivo. A todo jugador le gusta que en cada partido se llenen los pabellones y puedes sentir que el equipo es importante para los aficionados. A nivel de profesionalización, es completamente distinto y, por ejemplo, no se escucha ningún caso de impago. Cada vez se fichan más jugadores extranjeros y aquí, en el Wisla Plock todo funciona alrededor de nosotros. Siempre intentan que estemos lo mejor posible y también intentan sacar mucho más rendimiento a los jugadores. En cuestiones de marketing están mucho más avanzados y también buscan ser sostenibles a través de esto.
¿Qué cambia al vivir en Polonia?
Llegué con ilusión y hay bastantes jugadores que hablan español y también tenemos al portugués Tiago Rocha, con el que hablo algo de gallego y nos vamos entendiendo. En el aspecto de vestuario, no tuve problema. En lo referente a la ciudad, el club se portó de forma fantástica. Se preocupan por todo, pero siempre hay diferencias. Lo que más se nota es a nivel de entretenimiento cultural. Añoras el poder ver alguna película en castellano. En cuanto a ocio es lo que más se nota. La vida empieza un poco antes, se madruga más porque a las cuatro es de noche, pero, por el resto, no hay demasiadas diferencias y se pueden encontrar muchos españoles y portugueses en la calle y en el centro de la ciudad se encuentra gente en las distintas cafeterías.
Está concentrado con la selección, están tres porteros y todavía falta Sterbik, ¿hay opciones de quedarse?
Manolo Cadenas ya me explicó que venía a esta concentración porque Sterbik estaba con molestias y, en principio, no iré a las siguientes. Aún así, yo estoy intentando entrenar lo mejor posible para tener una oportunidad. Cuando vuelta Sterbik no estaré, pero siempre es bueno acudir porque la exigencia es alta y sirve para mejorar.
Al menos, su nombre comienza a conocerse en el ámbito internacional
Sí, y debido a esa idea también opté por ir a Polonia. Es verdad que la gran diferencia, además de la profesionalización, es la exigencia. Hay partido cada tres días y la presión también es mayor. Tienes que jugar partidos cada tres días y ante equipo mejores y siempre tienes que estar al máximo. De cara a la selección, no siempre es fácil integrarse y también ayuda tener experiencia en concentraciones.
¿Esperaba jugar tanto?
Estoy jugando mucho más de lo que esperaba. Cuando llegas a un equipo nunca piensas en jugar tanto. De hecho, la pretemporada me costó porque no conocía a los rivales, tampoco a los jugadores y claro, es complicado. Manolo Cadenas nos está sacando mucho rendimiento porque somos un equipo joven. Eso sí, entrenamos muchísimo.
Le ganaron al Barcelona, ¿qué significa?
Para nosotros es importante y, sobre todo, para la ciudad. No puedes imaginar cómo se viven los partidos contra el Barcelona o el Kiel. En cuarenta y cinco minutos se vendieron todas las entradas y claro, para nosotros, siempre es algo que motiva. Es un equipo que pierde uno o dos partidos al año y nosotros le pudimos ganar. De cara a los aficionados, fue algo muy importante y se notó mucho. Fue muy bonito.
Hablamos de la selección y de que por delante de usted está Sterbik. Son palabras mayores.
Tiene unos diez u once años más de experiencia que yo y jugó en los mejores equipos de Europa. Es un portero que conoce todo el mundo y que le tiene respeto todo el mundo. Es un seguro en la portería. Es algo normal, lleva jugando mucho tiempo y es uno de los mejores porteros del mundo o el mejor.
En la selección, ¿se habla de ganar el Mundial?
España está acostumbrada al éxito y se trabaja para ello. Ganar es complicado porque Dinamarca y Francia tienen una gran selección. También Croacia o Polonia, que está en ascenso. Sacar una medalla es algo que requiere mucho trabajo y tienes que hacerlo todo bien, pero existe esa ilusión. Tras el Mundial y el bronce europeo se exige ganar y, en parte, es algo normal. Requiere sacrificio porque en lugar de estar de vacaciones estás concentrado, pero trabajas para ganar.n
