Cuando hace un mes el Celta encadenaba diez jornadas perdiendo y el puesto de Eduardo Berizzo pendía de un hilo, el técnico decidió variar su política de concentrar la noche antes de los partidos en casa a los jugadores. Y llegó la sufrida victoria ante el Córdoba que inició la recuperación del equipo.
Ayer, el entrenador argentino explicó las razones de aquella decisión y anunció que mantendrá la medida porque ha sido beneficiosa. "Nos concentrábamos y el equipo estaba acostumbrado a no hacerlo. En un momento dado creí que descomprimir era saludable y me parece que debemos seguir por esa línea. No es un factor fundamental y puede haber diferentes puntos de vista. Me pareció que la descompresión de ese aspecto era bueno", razonó.
Eso sí, Berizzo negó que atendiese así una petición de la propia plantilla. "No me lo pidieron. Si lo hubiesen hecho también, lo hubiese atendido. Parte de una temperatura que sentí y vi que venía bien llegar sobre partido, no saber la formación hasta antes del choque, estar todo el mundo concentrado… Me gustó cómo nos comportamos hace un mes atrás y estamos en esa línea", dijo.n
