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Los porteros, a fuego lento

Rubén Blanco y Sergio Álvarez, durante un entrenamiento en las instalaciones deportivas de A Madroa.
photo_camera Rubén Blanco y Sergio Álvarez, durante un entrenamiento en las instalaciones deportivas de A Madroa.

Rubén vive su cuarta tentativa de una titularidad que a Sergio le costó tres años alcanzar 

El Celta ha tenido clara en las seis últimas temporadas su apuesta por los porteros de la casa. Y en dicha preferencia ha tenido en cuenta la diferencia generacional de sus dos principales exponentes, tras la marcha de Yoel Rodríguez al Valencia. Sergio Álvarez tiene 32 años mientras que Rubén Blanco tiene 23. De ahí que desde hace ya varios años se espere un relevo generacional que no da llegado. El pasado sábado, Miguel Cardoso sorprendió iniciando un cambio que ya se intentó tres veces antes.
Porque el meta mosense ha hecho amagos más o menos profundos de titularidad en los tres últimos cursos. Subió definitivamente al primer equipo con la llegada de Eduardo Berizzo en verano de 2014 con 19 años, pero esa campaña sólo jugó en Copa ante Las Palmas y Athletic.
Ya en la campaña 2015/2016, Berizzo volvió a darle la Copa, aunque esta vez con mucha más enjundia al llegar a semifinales. Pero en Liga, apenas apareció en siete jornadas, sólo dos consecutivas (32 y 33). Comenzó como titular al arrastrar Sergio una sanción del año anterior, pero en ese primer partido comenzó su gafe con las lesiones. Fue un primer intento muerto casi antes de nacer.
Ya en la 16/17, que comenzó de nuevo lesionado, sí se dio la primera apuesta seria. En la jornada 11, en un duelo contra el Valencia, apareció en el once y se mantuvo en él hasta la 18. Un leve problema físico le hizo perderse tres partidos y reapareció para jugar tres más antes de lesionarse de nuevo y perderse el resto de la temporada. Es decir, jugó 11 encuentros ligueros, cuatro de Liga Europa en la fase de grupos y nada de otra Copa histórica con semifinales.
Apareció Juan Carlos Unzué en el banquillo pero, sin que mediase lesión previa, no fue Rubén el elegido de inicio. Pero sí apareció en la sexta jornada para no soltar la titularidad, salvo por una expulsión, hasta la 28. Entonces, las lesiones volvieron a frenarlo. Éste ha sido el intento de relevo más serio. De hecho, ya jugó 107 minutos y un partido más que Sergio pero sin marcar todavía diferencias. Ahora, afronta del cuarto.

De 28 a 23 años
El mosense cumple su quinta temporada en la primera plantilla. A Sergio le costó tres hacerse con el puesto, aunque en el último año en Segunda ya disputó 19 partidos. Sin embargo, la gran diferencia está en la edad. El de Catoira no fue titular hasta tener los 28 años y Rubén trata de hacerse con ese sitio con 'sólo' 23. Un lustro menos de trabajo.n

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