Aspas, Sisto, Wass y Maxi Gómez, los célticos mundialistas, entraron ayer en los últimos 50 días previos a Rusia
El Celta llega al final de temporada pensando, en lo colectivo, en apurar las últimas opciones de alcanzar una plaza continental. Pero, en lo personal, hay un cuarteto de futbolistas que son conscientes también de que se están jugando la posibilidad de acudir al próximo Mundial de Rusia. En concreto, son los tres atacantes más habituales para Juan Carlos Unzué esta campaña –Iago Aspas, Maxi Gómez y Pione Sisto– y el polivalente Daniel Wass.
Hoy por hoy, el que menos puede mostrar sobre el césped es Iago Aspas, que se recupera de la rotura fibrilar grado I en el bíceps femoral derecho que se produjo en el choque ante el Barcelona y que ya le ha hecho perderse el partido frente al Valencia. En principio, el moañés tampoco jugará este sábado ante el Villarreal pero podría reaparecer el próximo día 5 de mayo en el derbi ante el Deportivo. Se trata de una lesión muscular menor que no debería suponer una brecha en el punto de forma del pichichi celeste, que trabaja con denuedo para evitarlo. Además, aunque no llegue al encuentro con el club herculino, sí estaría en los dos últimos ante Real Madrid y Levante.
Julen Lopetegui, seleccionador español, ha contado con Aspas en todas las convocatorias desde noviembre de 2016 y todo hace indicar que repetirá para Rusia. Eso sí, cuenta con muy poderosa competencia: Diego Costa –también lesionado en las últimas semanas–, Álvaro Morata –que no acudió a la última citación internacional pero que es titular habitual con el Chelsea y ha vuelto a marcar– y Rodrigo Moreno –uno de los futbolistas de moda en un Valencia de Liga de Campeones–. El seleccionador deberá decidir si lleva a tres o a los cuatro.
Pione Sisto también está en todas las quinielas para ir a Rusia con Dinamarca. De hecho, su última convocatoria con la selección, siendo titular y marcando, precedió a la recuperación de su papel de titular en el Celta, perdido hace unas jornadas a manos de Emre Mor. Su rendimiento lo avala para, incluso, ser uno de los integrantes del once de Age Hareide, seleccionador danés.
Precisamente en manos de este último está Daniel Wass. Ausente de las últimas convocatorias, tras renunciar a acudir el pasado verano, el céltico está completando de nuevo una excepcional temporada en el Celta, lo que ha obligado al entrenador a replantearse la posibilidad de contar con él. Públicamente, ha expuesto que seguirá muy de cerca a su ex pupilo, con el que tiene una complicada relación al haber insistido en contar con él como lateral y no como centrocampista. Mientras, Wass sigue siendo pieza básica en Vigo y colecciona novias en el mercado. De ir a Rusia, bien es cierto, le resultaría difícil desbancar del once a los jugadores que lograron la clasificación, con repesca incluida.
Por último, la historia de Maxi Gómez con la selección uruguaya es breve –desde octubre del pasado año– pero continua. En Uruguay se da por hecho que el joven futbolista tendrá en Rusia la oportunidad de vivir una intensa experiencia siempre a la sombra del dúo de estrellas que copa la delantera charrúa, Luis Suárez y Edison Cavani. Mientras, en el Celta acaba de recuperar su innegable olfato goleador tras un parón de ocho partidos y acumula en Liga 15 goles.
La presencia de estos cuatro futbolistas en Rusia, aparte de otorgarle algunos ingresos extra, le supondrá al Celta una doble preocupación: que cerrarán la temporada más tarde –lo que complicaría su pretemporada si avanzan en la cita mundialista, sobre todo en caso de clasificación europea– y que estarán en un magnífico escaparate de cara al mercado –en el que son cuatro piezas codiciadas–.n
