Suso Soliño y Javi Díaz, claves en la victoria del Cangas en el derbi, dudan sobre su futuro
Partidos como el del pasado sábado en el Municipal de Pontevedra rejuvenecen a cualquiera. Victorias como la lograda en el derbi mantienen viva la llama. Y actuaciones personales como las de Suso Soliño y Javi Díaz con el Frigoríficos ante el Teucro confirman que la veteranía es un grado. Muchos grados, de hecho. El 50% de paradas del meta rosaleiro en la primera parte y el 13 de 15 final del extremo cangués en el lanzamientos habla bien a las claras de la trascendencia de este dúo nacido en 1975 que ya sabe lo que es cumplir 43 años. A esa edad, del futuro se habla año a año. Y a final de curso se verá si estas dos instituciones siguen en activo.
Por el momento, en Cangas se disfruta de ellos. Y ellos, del Cangas. "Uno sigue jugando por partidos como el derbi", reconoce Suso. "Jugar en un Gatañal casi lleno todos los partidos, o con 50 aficionados en Santander o con casi 1.000 el otro día en Pontevedra sí que te empujan a seguir", abunda Javi.
Desde la sabiduría que otorgan los años, los dos valoran en toda su medida el triunfo vital ante el Teucro. "Era un partido clave, ya no sólo por la afición al ser un derbi, sino porque estaban dos puntos por encima y de haber perdido estaríamos descolgados. Con el apoyo de nuestra gente, salimos a morder y después supimos mantener el resultado", analiza Soliño. "Nos hacía mucha falta esta victoria", conviene Díaz. En cualquier caso, los dos prefieren centrar sus esfuerzos en los por venir que en recordar el pasado reciente. Porque mañana visita Cangas el Puente Genil y "todavía no hemos hecho nada. Si ganamos, sacamos un poco más la cabeza de abajo y, además, los metemos a ellos también en la pelea", considera el portero.
Los dos sostenes del equipo tenían claro desde el principio que tocaría otra temporada de sufrimiento. "Somos un club humilde y año tras año tenemos que pelear por mantenernos. Nuestra meta es llegar a las últimas jornadas con opciones de salvación", opina Suso Soliño. Por su parte, Javi Díaz intuía antes de comenzar la campaña liguera que "Teucro, Alcobendas, Sinfín y nosotros estaríamos peleando por la zona baja. Sinfín ha logrado resultados inesperados, así que sería bueno meter en el lío a Puente Genil".
En lo personal, los dos restan peso a sus grandes actuaciones del pasado sábado, aunque se reconocen satisfechos –"todo lo sume es bueno", dice el guardameta–. Y lo enmarcan dentro de unas carreras largas cuya continuidad está en el aire. De hecho, Javi Díaz ya había decidido dejar de jugar en Asobal cuando "recibí la llamada de Camiña y arreglamos todo en dos días. Quería volver a casa y ahora estoy muy contento. Pero son 43 años y habrá que ver allá por abril cómo está el cuerpo y la cabeza. No es fácil".
Incluso Suso Soliño, que parece no tener fina, reconoce que "ésta es la temporada en la que me pensaré más seguir. Ahora tengo un negocio y compaginar las dos cosas, aunque el club me está dando facilidades, no es sencillo. Me encuentro muy bien pero sé lo que me cuesta".
Por si acaso, bien haría la afición canguesa y gallega en disfrutar de estos dos colosos.n
