El Panathinaikos sobrevive a la locura del fútbol griego, con la Liga sin empezar
El fútbol griego vive en estado de perpetua locura. La violencia en las gradas y fuera de los estadios ha impedido el arranque de la competición, que parece que sí comenzará este fin de semana y que en los últimos cuatro años ha sufrido parones de este tipo. Además, la crisis económica que ha azotado al país también lo ha hecho al fútbol e incluso hay casos de corrupción en este mundillo que se investigan internacionalmente.
En medio de este maremagnum, el Panathinaikos ha sobrevivido, que no es poco, pero ha visto mermado seriamente su potencial y, con él, su presencia internacional. De hecho, la pasada campaña cayó sucesivamente en la previa de la Liga de Campeones y en el play-off de la Liga Europa.
Con la colaboración económica de su afición, ha seguido vivo y está en pleno proceso de reconstrucción. La pasada temporada, acabó en la tercera posición en la liga griega, 30 puntos por detrás del campeón Olympiacos, su gran rival, y dejándose ganar por la mano la segunda plaza ante el AEK de Atenas. Con todo, no se derrumbó la apuesta realizada a mitad de la pasada campaña por el joven (40 años) técnico italiano Andrea Stramaccioni, con pasado en Inter y Udinese y que se hizo cargo del conjunto heleno en noviembre del año pasado para suplir al griego Giannis Anastasiou.
A la espera del comienzo de la Liga, ya ha disputado dos rondas previas en la Liga Europa, eliminando primero al AIK Solna (1-0 en casa y 0-2 fuera) y después al Brondby (3-0 en casa y 1-1 fuera).
En su plantel resalta por pasado el ex madridista Michael Essien, pero con escaso peso en el equipo. En la delantera juega Marcus Berg, compañero de Guidetti en la selección sueca, y este verano ha relizado hasta seis fichajes.n
