ÁLEX LÓPEZ. Jugador céltico cedido al Sheffield Wednesday

"Mi idea es volver al Celta, pero la decisión no depende de mí"

Álex López se medirá mañana al Hull City con el Sheffield Wednesday.
photo_camera Álex López se medirá mañana al Hull City con el Sheffield Wednesday.

El ferrolano se juega mañana el ascenso a la Premier League: "La situación pinta bien, aunque el rival es complicado"

En su primera temporada como cedido al Sheffield Wednesday inglés, el céltico Álex López está a un paso de conseguir el ascenso a la Premier League. Mañana, a las 18:00 horas y en el mítico estadio de Wembley, el ferrolano se medirá al Hull City en la final del 'play-off' de ascenso, su último encuentro antes de empezar a pensar en un futuro que quiere que sea celeste.

Cita importante para Álex López y el Sheffield Wednesday. ¿Buenas sensaciones?
Sí. Las sensaciones son buenas. Hemos llegado al 'play-off' con muy buenas sensaciones y en muy buena forma. Estamos trabajando bien en Sheffield. Entrenaremos en Wembley el viernes. No solemos cambiar las costumbres, da mala suerte. 

Era agosto y defendía el objetivo del ascenso para un club que prácticamente estaba peleando siempre por la permanencia.
Cuando hablaron conmigo en verano, me dijeron que querían hacer un proyecto para ascender o para estar peleando hasta el final. En el mercado de verano se hizo muy buena plantilla y ahí estamos. Vamos a jugar la final siendo fieles a nuestro estilo y controlando las emociones. Es una final y ojalá que podamos lograr el ascenso. Sería la recompensa a una gran temporada. 

El Hull City es...
Es un gran equipo con una gran plantilla. Hasta hace poco estuvo en Premier League y retuvo a futbolistas que han jugado en la Premier. Su objetivo también era ascender y ahí están, peleando con nosotros. Es una final muy complicada. Los dos perseguimos el mismo objetivo y no será fácil. Los dos equipos somos muy similares, pero nosotros debemos recuperar rápido y partir de nuestra posesión para poder hacer ocasiones de peligro. 

En el mejor escenario posible.
Estoy muy ilusionado por jugar en Wembley. Bueno, y por el ambiente. No deja de ser una final en campo neutral, en un estadio histórico. Tengo ganas, tengo sensaciones de una final y muy feliz.

Más de 30. 000 fans del Sheffield estarán animando. Se nota la dimensión del evento.
Ya vendieron todas las entradas (se ríe). Creo que son 35.000 entradas más o menos. Es un club con una masa social grande y se nota cuando juegas en casa. Y con una final cuesta imaginarlo. Es una buena oportunidad para que todos podamos disfrutar de la victoria. 

El ascenso está en juego, pero quien gane se llevará 180 millones de libras. Es el partido más beneficioso de todo el panorama del fútbol. 
El dinero que se mueve en el fútbol inglés no lo hay en otro lado. Así que ya ves, es una barbaridad. Esta cantidad supone un aliciente económico para cualquier club. Se está viendo la diferencia de traspasos de la liga española y el fútbol inglés. 

Eres un futbolista de ascensos. Lo hizo con el Celta y ahora está a noventa minutos de la Premier League. 
(Se ríe) Jugué tres 'play-off'. Uno con el Celta y perdimos en penaltis. También jugué con el Narón y perdimos. Esperemos que a la tercera vaya la vencida y poder ganar. La situación pinta bien aunque el rival es complicado. 

¿Qué  le preocupa del Hull City?
Quizás todo. Abel Hernández es un futbolista rápido que metió muchos goles. Después en el centro del campo tiene a Diamé que es un futbolista que me encanta. Es un equipo muy bien formado, muy sólido. La defensa es experimentada, con centrales que han jugado en Premier League como Dawson. Es un equipo muy difícil. En el partido de la eliminatoria de play off (Derby County 0-3 Hull City) fue complicado. Ganó en el campo del Derby con comodidad y después en su estadio iba 0-2 perdiendo en los primeros veinte minutos. A ver como llegan a esta final, el aspecto mental es fundamental.

Y ustedes psicológicamente, ¿cómo llegan? 
Nosotros también trabajamos en ese sentido. Estamos muy ilusionados. Carlos (el entrenador) nos dice que podemos hacer historia. Que después de tanto tiempo sin estar en Premier League podemos devolver al club a la Premier. Vas por la calle y te paran, te dan las gracias y disfrutan mucho de esto. 

Desde el 2000. De hecho el Sheffield Wednesday fue uno de los creadores de la actual Premier League.   
Sí, van dieciséis años que el club no está en Premier y eso se respira en el ambiente. La gente del club, los aficionados, todos estamos muy ilusionados de esta oportunidad que tenemos. Hace cuatro años estaba en League One (cuarta división inglesa) y después de tres temporadas peleando por no descender, estar en esta final es un ilusión muy grande. 

¿Al terminar la final tiene billete para Vigo o juega en Premier League? 
Mi idea es volver al Celta, pero al final depende de la decisión de otras personas. El club y el cuerpo técnico tienen que valorar lo que quieren hacer conmigo. Y después de lo que decidan ya veré las opciones que puedo tener. Pero sin duda que esta aventura ha sido muy buena. Tanto el fútbol inglés como Inglaterra me han gustado mucho y no descarto nada. Tampoco le he dado muchas vueltas a mi futuro. Me interesa estar centrado en la final, que es lo importante. 

Álex López enfrentándose a  Pep, Mou y Klopp. No suena mal. 
(Se ríe) Lógicamente, sería bonito. No descarto nada, pero mi primera idea es la de volver al Celta. Pero claro, cuando no depende de ti, no puedes hacer nada. Aunque si no me quedo en el Celta mi primera opción es ir a la Premier League.

Se marchó Augusto y vino Marcelo Díaz, ¿se pensó el Celta en repescarlo?
Pues no lo sé. Pero tuve una opción de volver a España y el Sheffield lo bloqueó todo. El club no quería que saliera, prefería que estuviera aquí. 

¿El Celta u otro equipo?
No, no, de otro equipo de Primera División. 

Si hay penalti, ¿lo tira?
Sí, por supuesto. Ya me tocó con 21 años tirarlo en el 'play-off' de Granada con el Celta. Es un momento de tensión y el corazón va a mil por hora. Pero son momentos que me gustan. Estos días entrenamos los penaltis, porque es algo normal. Prácticamente, llevamos toda la semana tirándolos. n

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